Por Coraza
DRAKKAR es una banda italiana de power metal. No confundir con la banda belga del mismo nombre, el cual hace referencia a las naves escandinavas medievales. Desde finales de 1995 llevan dando guerra en Milán, su ciudad natal. Ya en sus inicios llamaron la atención del público y de las discográficas, pero las ventas no les llegaban. En un mercado saturado de power metal como es el italiano, dominado por los indiscutibles reyes RHAPSODY, pasaron un poco desapercibidos. Pasaron varios años inactivos, hasta que volvieron a los escenarios con nueva formación en 2007, y este año, el 2015, presentan su quinto álbum de larga duración. Descubramos, pues, lo que nos tienen preparados, con los bonus track y todo.
El inicio de álbum es muy, muy bueno, aunque por otro lado nada diferente a lo que se podría encontrar en otras bandas. Enseguida viene el tema que le da título al disco Run with the wolf. Sin conocer apenas el grupo ni su historia, me alegro de que si hay un miembro del grupo que se ha mantenido desde el 2000, éste sea el teclista. Escuchad la canción y luego me contáis.
El disco continúa con una canción dedicada a Juego de tronos. Me encanta cuando los grupos sacan su lado «friki» y hacen una buena canción sobre literatura. O cuando buscan sorprender al fan con una canción mucho más melódica, o más agresiva, y en cualquier caso diferente al resto del disco, sin dejar de presentar una técnica y pasión igual o superior a la de sus otros trabajos. Ante todo, que lo hagan por amor. Ride the Storm tiene trozos que parecen de música folklórica. ¿Y por qué no?
A continuación vuelve el sonido más duro del principio. También un tema en acústico. Parece que los DRAKKAR se han propuesto demostrar toda su experiencia como músicos en este trabajo. ¡Bien hecho, chicos!
Gods of Thunder es otra canción cargada de caña que demuestra sus influencias, entre las cuales destacan BLIND GUARDIAN, HELLOWEEN, RUNNING WILD, RAGE o DIO. Y la siguiente canción, tres cuartos de lo mismo. Una letra sobre libertad, sobre búsqueda de algo mejor, sobre fantasía y acompañada de un potente doble bombo. Y el gran mensaje de no rendirse jamás, de ser inamovible… Hasta que el disco se termina, con los bonus track aparte, y la última canción, otra bélica, parece más bien antibélica. Tan sublime como sus paisanos RHAPSODY OF FIRE en sus mejor etapa.
No sé si las versiones puestas a la venta tendrán o no los temas extras. Imagino que algunas sí. No tienen ningún desperdicio. Encontraréis un poco más del alma de estos artistas que tanto nos hacer recordar cuán importante es valorar la calidad musical de lo que escuchamos. ¡Grandes DRAKKAR! Tal como en las tierras nórdicas donde antaño surcaban las naves drakar están llenas de bandas de metal extremo, muchas consideradas las mejores del mundo, de Italia desborda el subgénero más «poderoso» del metal. ¡Grazie mille!
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