Hablar de este grupazo de Rus (Jaén), para mí es un placer, siendo su disco “Tierra Prometida”, uno de los mejores del pasado 2015 y ya era hora de hablar de este enorme y original trabajo que se ha marcado ALTO CONSUMO. Y es que últimamente nada más que descubro grupazos nacionales como DE LA CUNA A LA TUMBA, OVERDRY, MUTANT…
Tras formarse allá por el 2008 en un pequeño pueblo de la sierra de Jaén con el simple hecho de disfrutar de la música, en 2009 deciden lanzarse a componer sus canciones y cuando grabaron en los estudios Bombtrack de Úbeda su primera mano de la mano de David Castro (también ha trabajado con DOGMA otro grupazo, SOMBRAS DEL DESTINO, RADIOMUNDO, MOONLIGHT FEAR, MARDITA). Tras presentarlo en el ámbito local y provincial, en 2014/2015 se embarcaron en un proyecto mucho más ambicioso y a través de Oniric Recordings vio la luz este increíble trabajo de metal progresivo con toques andaluces y con un artwork de mucha calidad de la mano de Procesonegro (ABSENTA, BUENSUCESO), donde el juego onírico está asegurado.
“Al sol que más calienta”, es el tema que abre esta apología lírica llena de metáforas y recursos estilísticos. Desde las primeras notas nos damos cuenta de que estamos ante un disco muy trabajado en todos sus aspectos, donde los instrumentos encajan perfectamente, desde el bajo de Peri que da mucha corporeidad a los temas, la percusión con toques progresivos de Felipe Martínez, y las guitarras de Adolfo y Javi, tan melódicas como contundentes forman una estructura compacta y muy elaborada. Todo ello, enmarca a la luz de Juantxu Ruiz, muy melódica y pegadiza, con unas melodías que entran por tus oídos y se quedan muy cerca de tu alma. Son claras sus influencias en la voz, LOS PLANETAS, SÔBER… En lo que respecta al tema se contonea entre un inicio muy directo y agresivo, para diluirse en estrofas donde el sonido del bajo y la voz toman el protagonismo, como una cascada que cae estruendosamente y se calma en los regazos de sus sinuosos meandros. Un muy buen tema para empezar.
“El ojo del huracán”, seguimos con los inicios contundentes, con unos riffs de guitarras muy potentes y una voz donde se va viendo dejes de “flamenco”. Pero si algo llama la atención de este tema es el estribillo que sube y sube otorgándole una luz propia a la composición, lo que lo convierte en uno de mis temas preferidos del álbum. El toque álgido que le aportan al estribillo las guitarras abiertas y la percusión, llena la estructura por si sola. Además, otra cosa que tiene ALTO CONSUMO son sus letras, no te vale una sola escucha para entenderlas, sino que tienes que indagar en sus conceptos y asimilarlas, un detalle que me gusta mucho pues cada vez que escucho los temas me aportan cosas diferentes. Un solo de bajo inicia “Humo”, uno de los temas con reminiscencias andaluzas en la percusión, unas letras que van y vienen con su son particular y que cuenta con una estructura muy progresiva, con constantes cambios de ritmos y con una parte central muy rockera. Tras un breve silencio que, para la canción por un instante, un crescendo instrumental y vocal, donde la percusión resalta, golpea para abrir camino a una parte final muy potente.
“La oferta”, es un tema con un groove diferente al resto de composiciones, unos ritmos en las estrofas muy TOOL van agrandando la estructura hasta llegar al estribillo. Quizás sea el tema, que menos me gusta del álbum, pero a su vez también es muy grande, donde resaltan los solos de guitarras y los ritmos incisivos, puro rock. Pero es que lo que viene a continuación es una obra maestra, “Lo que traerá el mañana”. Quizás haya sido la canción que más he escuchado en el último año y que cada vez que la pongo me transmite mucho más que la anterior. Un corte repleto de emociones y sensaciones, que al grupo le costó casi un año terminarla y el resultado es increíble. Con sus cortos 8 minutos de duración que nos envenenan desde las primeras notas, llevándonos por caminos rockeros, toques blues, flamencos, progresivos… La lírica es una maravilla, una letra llena de esperanza y superación, que deambula por una estructura compositiva que encaja a la perfección, llena de matices y de arreglos que brillan con luz propia. ALTO CONSUMO, demuestran su maestría compositiva, es esta composición que va subiendo y bajando en intensidad, donde los toques progresivos harán las delicias de nuestros oídos, donde cada instrumento da lo mejor de sí y con una parte final que te atrapará y te calará hasta el alma. Un sonido de cuerda que se va apagando lentamente, se funde con un palmeo aflamencado, dejando constancia de nuestra tierra, mientras que, a la dulce melodía de voz, se van incorporando el resto de instrumentos hasta que explota en un final apoteósico y álgido como hacía tiempo que no escuchaba. Un 15 sobre 10 tiene este tema sin lugar a dudas.
El punto final del álbum nos llega con “Tierra prometida”, nombre que da título al álbum, donde volvemos a los riffs más rockeros y llenos de groove, donde el toque progresivo se adueña de la estrofa, que además cuenta con otro estribillo muy grande. Tema en el que resaltan los ritmos de guitarras y los solos, hasta llegar a la parte central donde las riendas la toman la voz y el bajo, creando una semiestructura silenciosa y repleta de feeling, otro toque de distinción que estalla en la parte final con ritmos supe progresivos y donde la percusión incide especialmente y brilla por su calidad. Otro temazo.
ALTO CONSUMO, con “Tierra prometida”, aportan una calidad suprema al rock/metal realizado en Andalucía, demostrándonos una vez más que el talento se tiene in nato, dando igual el lugar de procedencia. Un mastodóntico álbum que deberían escuchar todos los amantes de la buena música, donde entremezclan poesía lírica con estructuras que deambulan por lo más profundo de nuestros sentimientos.
Un 10/10.