Crónica del WARM UP PARTY Z LIVE FEST

 

Con un día nublado y chispeando por momentos llegamos a Zamora al mediodía, dónde la organización habían montado un buen escenario, con barra y aseos públicos y daba los últimos retoques a la mesa de sonido. Aprovechamos para comer y dar una vuelta, y pudimos ver la Catedral, el Castillo, las Murallas y el Casco Antiguo en general, para dirigirnos posteriormente al concierto

Eran cerca de las 20:00 horas cuando NOCTURNIA salían al escenario. Por suerte la lluvia, que había estado amenazando el festival a lo largo de todo el día, se había ido del todo, dejando una fría tarde más propia de invierno que de verano.

 

Salieron con fuerza y ganas con “Baraka”, con un estribillo pegadizo que comenzaba a meterse en la cabeza del público que ya empezaba a congregarse en la plaza de la Catedral de Zamora. Siguieron con “Sin olvidar quién eres” de su último disco “Tierra de Cobardes”, dando un salto con “Que nunca se apague tu corazón” a su disco anterior “Sin retorno”.

 

Le toca el turno a “Mi voluntad”, quizás una de las mejores canciones de su último disco, con un toque muy progresivo donde los teclados nos recuerda mucho a buenas canciones clásicas como “En busca del tiempo” con la que cerraron el concierto. Le siguió “En el silencio” y la optimista “Alza los Puños” que completaría su setlist.

 

Gozaron de un buen sonido, y nos demostraron que son una buena banda y perfectamente podría haber abierto el festival cualquier otro grupo en lugar de ellos.

 

Del power metal de NOCTURNIA pasamos al metal progresivo e instrumental de CICONIA. La banda vallisoletana se encuentra en pleno tour presentando su último disco “Winterize” y nos dejó un repertorio con abundancia de canciones de este, salvo “Jack O´Lantern” de su disco anterior.

 

“A wolf never comes alone” o “Towards the Valley” sonaron espectaculares, sumergiéndonos en un éxtasis ambiental donde sonaron pasajes dignos del mismísimo Steve Vai. Canciones como “Eloina´s Inn”, con un toque más duro nos recordaron mucho al mejor Joe Satriani donde la batería toma protagonismo y el control con cambios de ritmo muy marcados. Se despidieron con “Limbus”, una canción llena de luz y buen rollo que demostraron saltando a tocar entre el público.

 

Personalmente pienso que quizás la introducción de una voz, incluso una voz gutural dando un pequeño giro hacia bandas como Gojira, podría terminar de lanzarlos a la fama. Pero sin duda tenemos una gran banda a seguir muy de cerca en los próximos años.

 

Les llegó el turno a SIN CONTROL. Con un estilo muy peculiar mezclando estilos desde el thrash metal, bandas como Hamlet o hasta el heavy metal más clásico de Barón Rojo, del cual nos regalaron una buena versión de “Las Flores del Mal”.

 

Nos presentaron su último ep “Tiempos Duros”, con canciones como “No puedo más”, “Revolución”, “La Humanidad” o “Ningún Dios” y de canciones como “ El hombre” o “Sin Control”, de su anterior trabajo que lleva el mismo nombre de la banda. Los zamoranos jugando en casa, hicieron un concierto serio y compacto ante un público que poco a poco comenzaba a llenar la plaza.

 

Saltaron a la palestra REVOLUTION WITHIN. La banda de thrash/core con tres discos a sus espaldas vinieron a demostrar que el metal luso está más vivo que nunca. Después de una intro instrumental empalmaron “Bleed”, comenzando de forma brutal. Con “Growing inside” consiguieron convertirlo todo en un jodido infierno de puro trash metal, como bien dice la canción.

 

Comenzó “Without a Reason for Denial” con un Raça brutal, que de forma magistral interpretó una canción donde pudimos apreciar el buen trabajo de Shaq llevando el ritmo y los cambios a lo largo de toda la canción. Con “From Madness To Sanity” aminoraron la marcha un poco para mostrar una canción con un ritmo más lento y pesado que las demás.

 

Tanto bajo como guitarras pecaron un poco de pasividad a lo largo del concierto, pero esto fue contrarrestado un poco por su cantante, en contínua comunicación con el público, del que sacó algún que otro circle pit y un gran wall of death.

 

Siguió “Suicide inheritance”, corta pero demoledora, seguida de “Revenge Now”, canción con un ritmo varios cambios de tempo donde la batería y la guitarra comparten el protagonismo.

 

Con “Until I see the Devil dies” nos llevarán hasta el mismo día del juicio final, donde Raça llegará a asustar al propio diablo con sus guturales del comienzo de “Pull The Trigger”. Con “Pure Hate” y la versión de”Paranoid” de Black Sabbath dieron por terminado su buena actuación.

 

Poco antes de la media noche, les llegó el turno a los cabeza de cartel de la antesala del Z LIVE ROCK FEST. Una banda de lujo como es SARATOGA. Calentando motores para su próxima gira de 25 aniversario 25 AÑOS DE HISTORIA 15 AÑOS DE UNA LEYENDA, nos trajeron un setlist cargado de clásicos y con algunas varias canciones de su último disco. 

 

Le llegó el momento de los clásicos con “Tras las rejas”, con una banda que iba a darlo todo y un Jero que no acababa de estar contento con el sonido de la guitarra. Arreglados los pequeños problemas de sonido al sustituir el micro daba inicio a “Maldito Corazón” que junto con las “Puertas del Cielo” comenzaron a calentar al público.

 

Con un Tete que sabía ganarse al público y que en esta ocasión traía un poco más de ropa de lo habitual, creo que porque alguien “…se había dejado el aire acondicionado un poco fuerte en Zamora…”, descargaron “No sufriré jamás por ti” seguido de “Vivir en el bien Morir en el Mal”, demostrando que están mejor estado de forma que nunca.

 

“Vientos de guerra” y “Heavy Metal”volvieron a sonar más duras que nunca con un Dani en la batería pletórico, marcándose un solo que sirvió de presentación al resto de la banda. Bajaron un poco el ritmo con “Si amaneciera” y siguieron con “Como el viento” también del último disco. Para cerrar eligieron “Perro traidor” con la que pusieron el broche final a una gran fiesta de metal que sirvió para calentar la fría noche de verano en Zamora.

El mini festival gratuito preparado por la organización como antesala del Z LIVE ROCK FEST, que tendría lugar al día siguiente en el auditorio Ruta de la Plata, fue un autentico éxito, consiguiendo un lleno absoluto en la Plaza de la Catedral de Zamora y convirtiéndola en un monumento al heavy metal.