Texto por Al García
XNIGHT son una banda de rock alternativo, incluso a veces con un toque progresivo, que suele habitar en la escena de Barcelona. Su música no puede dejar a nadie indiferente y ya desde «I Am«, su primer EP, apuntaban maneras para convertirse en una banda con buena proyección. Es tanto así que hasta Rock Estatal ha decidido echarles el lazo.
Pues bien, el pasado 11 de noviembre decidieron dar vida en la sala Bocanord a su nuevo disco «Gaslight Bay«, una espectacular amalgama de melodías comerciales, compases y estructuras dignas del rock progresivo. Para un concierto tan importante como lo es el de presentación de un DISCAZO como este, decidieron contar con las jóvenes EPHEMERAL PARADOX, un grupo femenino (es decir, formado única y exclusivamente por miembros femeninos) que parece estar haciéndose un hueco en la escena metalera de Barcelona a golpe de conciertos cada vez mejor interpretados.
La noche comienza con EPHEMERAL PARADOX y os pongo en situación: suena una música envolvente que va creando cada vez más tensión y, poco a poco, van entrando las componentes del grupo, hasta culminar en un cover («I Love Rock And Roll» para ser exactos) y su cantante, Esther, aparece cual rockstar delante del micro. La actuación se va desarrollando poco a poco, calentando a un público que parece serles muy fiel. Aunque casi todo su setlist está basado en covers, podemos destacar algunas canciones propias como «Carry On» o «Your Own Enemy». En ésta última, debo destacar la voz de Nerea Perez, bajista del grupo. En sí, aunque no podemos obviar que es un grupo novel, su performance consiguió que el público se moviera y, al fin y al cabo, ¿para qué vamos a los conciertos si no?
Sin mucha demora, se plantan sobre el escenario los grandes esperados de la noche,XNIGHT, dejando claro que iban a darnos una actuación para recordar. Comenzaron con una de mis canciones favoritas de su nuevo disco «Gaslight Bay«, que no es nada menos que «Beehive». Siempre me ha encantado la presencia en el escenario que tiene Jordi, viviendo cada una de las notas que toca en una catarsis incluso a veces descontrolada, pero siempre cautivadora. Entre las muchas canciones que pudimos escuchar esa noche, «Throne Denied» es, sin duda, la que más me gustó. La espectacularidad de la voz de Noa, proyectándose sin miedo a través del estribillo e imprimiendo una sensibilidad arrolladora, delicadamente envuelta por las guitarras, es, simplemente, fantástica.
Ya para acabar, el toque que da ese matiz especial al sonido de la banda, lo podemos encontrar en «My Half», una canción poderosa, tenebrosa a veces, graciosa y desconcertante. Quizás un estandarte digno de ofrecer una amplia visión de lo que puede hacer la banda, a pesar de pertenecer a su anterior disco «I Am«. Si tenéis oportunidad de poder ir a ver esta grupo, os aconsejo que no la paséis por alto, porque, a parte de que tienen la fechas muy repartidas por la península, os harán pasar una experiencia musical inolvidable.