Texto y Fotografía: José Emilio Paqué
 

11-11-17

Un cumpleaños como el de ARS NOVA XIV, celebrando una década sobre los escenarios, no podía pasar desapercibida para el público y por ello, desde METAL KORNER, no dejamos la oportunidad de asistir a uno de los conciertos de su gira «Una década girando»En esta ocasión, por cortesía de ON FIRE ROCK PROMO, nos desplazamos a la capital granadina para asistir al concierto que dieron el pasado 11 de noviembre junto al grupo motrileño ANIMA AETERNA, que hacía su debut en directo fuera de su localidad.

Nos recibió una temperatura todavía suave para las fechas que eran y la proximidad a Sierra Nevada, gracias a un cielo totalmente despejado y a la ausencia de viento que nos bajara el aire fresco de la sierra, pues toda la cara norte se vestía ya de blanco. Sin duda buenos augurios para una gran noche de rock y metal.

La hora de apertura, que en un principio era a las 22:00 horas, se vio retrasada una hora por lo que aprovechamos para recargar energía tranquilamente en un bar cercano y disfrutar del plato estrella de la gastronomía granadina: las tapas. Nos dirigimos para recoger la acreditación de prensa y la autorización todavía no había llegado. Finalmente el personal de la sala, muy cordial y amable en todo momento nos dejó pasar con la intro que abría la actuación de ANIMA AETERNA ya sonando.

Como ya hemos dicho, la joven banda de la Costa Tropical era la primera vez que desplegaba sus alas fuera del nido y para ello había ido a volar ni más ni menos que a la propia capital granadina, sin duda junto con Málaga y Sevilla, una de las capitales del metal en Andalucía.

 
Bajábamos las escaleras de la sala Boogaclub a toda prisa con la intro que nos anunciaba su actuación de fondo, llegando justo a tiempo antes de que comenzara a sonar la primera canción. Situada en el sótano, la sala tenía aspecto de discoteca con techo no muy alto, barras a los lados y varias columnas en el centro. Con un tamaño medio, se podría decir que se trata de una sala «acogedora», y aunque el escenario para mi gusto era un poco pequeño, elevado apenas un peldaño sobre el suelo en una pequeña tarima, si que me sorprendió la calidad tanto acústica como lumínica, con un equipo nuevo que el gran técnico de sonido Rosqui supo aprovechar a la perfección.

En un escenario que se les quedó pequeño se situaron, al frente la cantante Noemi Regil en el centro del escenario flanqueada por los guitarristas Esteban Leyva y José Manuel Gónzalez, la última incorporación de la banda, mientras que en la línea posterior teníamos la batería junto a los teclados, a cargo de Rafa Correa y Germán (Kaldren)  respectivamente.

Con la cantante Noemi Regil al frente, nos hicieron un repaso a su último EP «In Memoriam», comenzando con una canción como «El rito», con un sonido más duro y unas guitarras más rápidas, contrastando con otras más lentas y melódicas como «Mujer de hierro» o «Dido».

Cabe destacar también la actuación del bajista Juanjo Rubiño, en segunda línea todo el concierto, el cual dio un paso al frente cogiendo el protagonismo para marcarse un buen solo al inicio de «Aléjate», al igual que los dos guitarristas Esteban Leyva y José Manuel González Muelas, la última incorporación al grupo que sonaron bien coordinados y dejaron en alguna ocasión sus puestos en los flancos del escenario para bajar a tocar entre el público.

Nos sorprendieron con una versión del gran tema «Desátame» de Mónica Naranjo y con «Resurgir», un tema nuevo potente y melódico a la vez donde destaca el ritmo marcial con el que entra la batería de Rafa Correa en escena y donde los teclados a cargo de Germán cogen más protagonismo desde el principio.

Para terminar eligieron «Principio piramidal» otro tema contundente de su último trabajo que contrastó con «In memorian» algo más sosegada, dando por finalizada una buena actuación, donde pudimos comprobar que han mejorada bastante, especialmente su vocalista Noemi (se notan las clases de  y han evolucionado como grupo, sonando más compactos.

Le llegó el turno a los sevillanos ARS NOVA XIV. El quinteto de folk rock sinfónico fusiona estilos como el blues, el jazz, la música clásica o la celta, con un especial protagonismo de la flauta travesera y el piano, consiguiendo un sonido fresco y clásico a la vez que nos recuerda a grupos como Jethro Tull.

Comenzaron con «Abre los ojos» y «Catorce» recogida en su último disco con Gabriel Vicente cantando y armado con su flauta travesera, dejándonos a todos embelesados cual flautista de Hamelin, para luego bajarse del escenario y cederle el protagonismo a su compañero Gabriel Gómez, el cual se marcó un gran solo de guitarra en esta última, con un sonido que nos recordó mucho a Brian May.

Siguieron con «Mother Moon» un suave dueto entre teclado y flauta que se transforma en una animada melodía instrumental con varios interludios que nos recuerdan a los mejores Jethro Tull o Deep Purple, para finalizar de nuevo in crescendo con un sonido más folk.

No faltaron la balada a dos tiempos «Sumergido en el tiempo» o un clásico como «Moon Revenge» o «Feeling Alone», de la que tocaron solo la parte final, donde disfrutamos de la calidad y el entusiasmo a los teclados de Elena Atencia.

 

Encararon la recta final con «Renacimiento», con un sonido muy folk que nos recordó a los mejores mago de Oz, demostrando su calidad y su versatilidad con los instrumentos cuando Clara Castrillo cedió las riendas del bajo a Gabriel Gómez para coger el violín, mientras que este dejaba a su vez su puesto a la guitarra a Gabriel Vicente, para encargarse también de la voz. 

 

Gran actuación, donde lo único mejorable hubiera sido la asistencia de público, que contó con buen sonido e iluminación, con unos grandes músicos que como guinda del pastel terminaron con una gran versión de la canción de Deep Purple: «Highway Star» también cantada por Gabriel Gómez, donde sobresalió José Antonio Gónzalez, encerrado durante todo el concierto en la parte trasera, y donde Elena volvió a demostrar que no tiene nada que envidiar al mismísimo John Lord.

Para cerrar la noche pudimos disfrutar de la banda de versiones THE HOUSE OF COVERS, que supieron interpretar con solvencia un repertorio muy variado, con canciones como «Highway Chile» de Jimmy Hendrix, «Cocaine» de Eric Clapton o incluso «You shock me» de AC/DC.
 

Atreviéndose también incluso con una versión de la canción «Money» de Pink Floyd, donde destacó la gran voz de Aza Pérez, que supo hacer suyas todas las canciones que tocaron, incluidas «Ain´t No Shunshine» de Bill Withers, «Master Blaster» de Stevie Wonder, «7 Natin Army» de The White Stripes o la mítica «Born To Be wild» de Steppenwolf con la que dieron por finalizado su repertorio y pusieron punto y final a una gran noche de rock y metal.