El pasado viernes 16 de noviembre volvimos a la capital de Reino narazí dispuestos a empaparnos y disfrutar de una noche de puro rock and roll. Estábamos citados en la Sala Prince, situada en el barrio del Realejo de Granada, para asistir al concierto que INCONSCIENTES iban a realizar dentro de su gira presentación de No somos viento (del que podéis leer la review aquí). La banda elegida para abrir en las tres fechas de Andalucía (Sevilla, Granada y Málaga) era TERRAL, un joven power trío de rock malagueño. Queremos agradecer el buen hacer de El Dromedario Records, que facilitó nuestro trabajo y nos trató de la mejor de las maneras. También os dejamos en este enlace la crónica que hemos realizado del concierto del día anterior en Sevilla. Y es que no nos queríamos perder la gira andaluza de estas dos bandas y hemos dado la máxima cobertura posible, dentro de nuestras posibilidades.
 
  
Tras unas cervezas acompañadas de sus correspondientes tapas en un bar cercano (bendita Granada y benditas tapas) y algo después de las 22:30, saltaban al escenario de la Prince TERRAL, dispuestos a deleitar al aún escaso público con su poderoso rock and roll. La columna vertebral de la banda es simplemente la autenticidad. No hay remilgos, no hay adornos, no hay complejidad musical. Es simplemente rock y eso nos encanta. No por ello suenan planos o aburridos, en absoluto. Sus temas son redondos, sencillos y directos, compuestos para el deleite del amante del rock más puro. No hay ninguna pretensión más allá que la de electrizar con su energía vibrante al respetable. El sonido acompañó a su actuación, que progresivamente fue aumentando de temperatura gracias a una muy buena actitud encima de las tablas.
 
 
El trío, pese a ser bastante joven, atesora una gran calidad, buena técnica y animada puesta en escena. La banda, formada por Sergi, Carlos y Rafa, se metió en el bolsillo a los pocos valientes que presenciamos su performance en la Prince. Una sala que tiene una espectacular localización, amén de gran sistema de sonido y luces. Pero la verdad es que verla tan vacía durante su actuación hizo ponerme un poco ‘triste’.

Ninguna banda merece tocar ante tan pocas personas, pero mucho menos una banda que se dejó el pellejo en el escenario como TERRAL, con sus músicos por el suelo sudando y punteando sus cuerdas con toda la pasión imaginable. Una gran actuación de rock’n’roll que nos dejó con ganas de más. La voz rota de Sergi nos despedía y presentaba a los verdaderos protagonistas de la noche mientras el telón negro tapaba el precioso escenario.

 
Setlist:
Trampera
De punta
Motores
De cuento
Alergias (I Shot)
Basta ya (AC/DC) + Lola
Ahora
Por las calles
La del bar + final
 
Tras una pequeña pausa de unos 10 o 15 minutos para el pertinente cambio y adaptación de backline, aparecían en escena INCONSCIENTES. La sala ya lucía con otro aspecto, rondando las 100 personas aproximadamente. Iñaki Antón aka ‘Uoho’ era recibido con una gran ovación, ya que es el cerebro de esta más que consciente formación vasca de rock. Su pasado como músico es impecable, habiendo participado en grandes formaciones como Platero y tú o Extremoduro. En INCONSCIENTES ha sabido rodearse de un elenco de músicos de una gran calidad. Comenzaron interpretando Cuestión de principios, tema instrumental que sirvió a modo de introducción para empezar a moldear lo que a la postre conformaría un show que rozaría la perfección: completo, mágico, lleno de electricidad relampagueante en forma de canciones llenas del más sincero y puro rock and roll. 
 
 
Sí, la banda presentaba No somos viento, del que dieron buena cuenta en su setlist y que desgranaron en su mayor parte, con temas como Todas las calles tienen tu nombre, En el pulmón o la que da título a su nuevo CD, No somos viento. Pero no faltaron temas de sus otros álbumes, sobre todo de La inconsciencia de Uoho, su debut de 2007. De su segundo doble CD, Quimeras y otras realidades cayó únicamente Otra realidad, un auténtico temazo, de los más duros y potentes de su corta pero intensa discografía. El resto de su setlist se basó en los citados álbumes amén de varias versiones de Platero y tú, como El roce de tu cuerpo o Alucinante, clásicos himnos que ya forman parte del imaginario rockero español y que Jon Calvo como frontman (voz y guitarra) defendió a la perfección, con su tono de voz rasgado y agudo. Por cierto, fueron los temas más coreados y aplaudidos por el público, lógicamente, por la nostalgia y por formar parte de nuestra cultura rockera. 
 

Iñaki es un portento a la guitarra. Sin ser excesivamente virtuoso o poseer una técnica depurada, sabe transmitir con sus preciosas hachas Gibson lo necesario para removerte el estómago y el corazón, golpeando con sus rasgados de cuerda el alma musical de cualquier persona que se precie y se considere rockera. Mucho feeling a la hora de tocar, que hace que la sinergia sea inmediata con el público, sumiéndolo en una efervescencia total, rozando el éxtasis. AC/DC, Status Quo, Leño, Extremoduro, Platero y tú… todo metido y mezclado (que no agitado) en un cóctel perfecto, burbujeante, fresco, imaginativo y con unas letras que saben llegar hasta muy dentro.

 
 
Mención especial a la base rítmica de la formación. Ignacio a los parches y Miguel al bajo consiguen ser un más que efectivo pegamento, juntando y dirigiendo todos los sonidos con una cohesión difícil de quebrar. Si a ello sumamos el teclado de Aiert y ciertos momentos estelares y brillantes, con ese pelo alocado en cabeza y a camisa abierta, tenemos un combo de rock del más alto octanaje, con una calidad innata y que te electriza de arriba a abajo, quieras o no. 
 
 
 
En resumidas cuentas, disfrutamos de una noche irrepetible, con un sonido básicamente perfecto y con una banda en estado de gracia. Y es que su más reciente No somos viento es, para mí, el mejor álbum editado por INCONSCIENTES hasta la fecha, sin quitarle mérito al resto de su discografía. En vivo funciona a la perfección y dieron buena cuenta de ello. Un disco hecho por y para el directo, que prueba que la banda se ha puesto las pilas y va muy en serio. Esto ya no es «un proyecto más de músicos de Extremoduro o Platero y tú». Esto es una banda con todas las de la ley, debiendo ser reconocida como tal. Y nosotros queremos seguir disfrutando de esta inconsciencia llamada INCONSCIENTES, tanto en estudio como encima de un escenario. ¡Nos veremos en otra!