Review: RISE TO FALL siguen fieles a sus raíces con “Into Zero”

La banda vizcaína RISE TO FALL acaba de editar hace unas semanas su cuarta creación, titulada Into Zero y que ha sido grabada en los Chromaticity Studios de Pedro J. Monge y mezclada y masterizada en los Hansen Studios de Dinamarca. Formado por Dalay Tarda a la voz, Hugo Markaida y Dann Hoyos a las guitarras, Javi Martin al bajo y Xabier del Val a la batería, este quinteto ha tenido siempre las ideas muy claras en cuanto a la dirección que dar a su estilo, practicando un metal moderno fuertemente influenciado por el sonido de Gotemburgo, es decir, el death metal melódico sueco de los noventa. Aunque muchos ya les conoceréis por ser una banda que se ha movido bastante sobre todo por el norte del país, lo cierto es que todavía son bastante desconocidos para el bagaje que atesoran, siendo una de nuestras bandas más internacionales. Su primer álbum, Restore the Balance, data de 2010 y con él sacudieron fuertemente la escena vasca, teniendo la oportunidad además de tocar en aquella edición tan metalera del Bilbao BBK Live junto a RAMMSTEIN o SLAYER o abriendo para bandas de prestigio internacional como AMON AMARTH, THE AGONIST o SCAR SYMMETRY, con quienes además de escenario en el pasado, siguen compartiendo mucho en lo musical. No conformes, decidieron salir y embarcarse en una gira por… ¡Japón! Diría que la famosa zona de confort no va con esta gente. Dos años después llegaría su segundo largo, Defying The Gods, el cual les sirvió para mejorar la producción del anterior redefiniendo su death melódico y para tocar en festivales como el Resurrection Fest o el Costa de Fuego y abriendo para SOILWORK o BIOHAZARD, además de realizar una nueva gira internacional que les llevó por Ucrania, Rusia y Suecia. Ya en 2015 llegó su consagración con End Vs Beginning, que les llevó a tocar en Europa y China.

 

Su flamante nuevo disco, Into Zero, supone un escalón más en la carrera de una banda currante que no renuncia a su personalidad. Si eres de quienes flipan con la música de esa injustamente menospreciada etapa de IN FLAMES que la banda sueca emprendió con Reroute To Remain y que extendió hasta A Sense Of Purpose (e incluso, a grandes trazos, hasta la actualidad) y no conoces a esta banda, descubrirla es lo mejor que te va a pasar este mes. Palabra. RISE TO FALL reproducen a la perfección ese melodeath bastardo hijo de AT THE GATES y del metalcore y metal más moderno (mezcla similar a la que practican también en la actualidad los anteriormente citados SOILWORK), con gran influjo de melodías creadas con teclado y con una adictiva combinación de voces guturales y limpias.

En este nuevo trabajo no encontraremos grandes novedades con respecto a su anterior End Vs Beginning, disco con el cual parecieron dar por fin con la tecla en cuanto a producción, algo deficiente en su primer disco y todavía mejorable en el segundo. Consta de doce cortes de una extensión muy similar y que no tienen en principio mucha relación conceptual entre ellos ni siguen un relato o línea argumental. Doce temas a saco en los que el conjunto vasco despliega todo su potencial a la hora de combinar música pesada con pegadizas melodías.

 

The Descendant, primer corte del disco, no engaña y ya deja a las claras lo que nos vamos a encontrar durante todo el álbum: un sonido no apto para férreos defensores del metal más auténtico, con esa pista de audio sampleada a base de sintetizadores que sirve de introducción y la combinación de riffs rápidos y medios tiempos, así como un estribillo edulcorado en su justa medida. La voz de Dalay Tarda cabalga entre el gutural y un scream que me recuerda mucho al que viene practicando Anders Fridén, por un lado, y la voz limpia melódica que suele ser protagonista en los estribillos por otro. Tanto me recuerda esta banda a los IN FLAMES modernos que el segundo tema, In The Wrong Hands, me lo llegan a meter en el A Sense Of Purpose y si no presto atención casi que ni me entero. Y no es menos verdad que podría decir lo mismo en mayor o menor medida de cortes como House Of Crosses, Temptation Feeds On Our Weaknesses, Zero Hour o Effects Of The Terrestrial Syndrome.

 

Acid Drops viene con una base de teclado en la línea de otras bandas clásicas del género como DARK TRANQUILLITY. Y aunque también nos trae ritmos rápidos y pesados, acaba resultando un tema con muchísima melodía que lo convierte así en un single perfecto para este Into Zero. Virgin Land es otro tema con todo lo necesario para convertirse en hit de la banda. Mucha melodía respaldada por el doble bombo de Xabier del Val, que es protagonista para aportar consistencia sobre todo en un estribillo coreable y pegadizo al máximo. Por otro lado, no podemos dejar de destacar The Empress que es, básicamente, el tema más diferente a los demás del disco y a su vez el mejor. La personalidad que arroja no la escuchamos en el resto de tracks y, unido a que se trata de una balada preciosa con piano de fondo, terminó de ganarme con las escuchas.

Into Zero es un trabajo solvente y al nivel de lo mejor que se ha hecho en este tipo de sonido tan característico, manteniendo el excelente nivel ya mostrado en End Vs Beginning a pesar de que decrece un poco en el último tercio. Encantará a fans de IN FLAMES, SOILWORK o DARK TRANQUILLITY. Puede que RISE TO FALL abusen aún de reproducir muy fielmente sus influencias, porque cuando sacan su toque más personal logran crecer. Quedará eso pendiente para un quinto álbum que esperamos con ganas de una banda que puede que por estilo tenga más posibilidades de triunfar fuera de España y, visto lo visto, quizás ellos mismos lo sepan…