Aquella fría noche navideña helaba cada rincón de Sevilla. Bueno, menos uno. En la céntrica sala Malandar un grupo de irreductibles decidió no resignarse ante la monotonía de estas fiestas y asistir al concierto de los bilbaínos RAT-ZINGER junto a los locales RUIDO BRUTO gracias al inestimable trabajo de Sonido Sur.
 
No son RAT-ZINGER una banda que se prodigue mucho por el sur, de hecho era su primera visita a la capital andaluza. Un hecho sin duda sorprendente, pues el exitoso cuarteto se encontraba presentando nada menos que su quinto disco, titulado Santa Calavera. Igual eso se notó en que no petaran la sala, a medio llenar pero con el aspecto saludable que aportaba un público con ganas de pasarlo bien y de lo más variopinto, aunque la vestimenta punk era la que predominaba.
 
Pasadas las once de la noche, la banda afincada en Sevilla, RUIDO BRUTO, comenzó su actuación. Una historia cuanto menos llamativa la de estos tres músicos venidos de lugares diferentes. El guitarrista Jose, Sergi a la batería y Gianni a las cuatro cuerdas proceden de Madrid, Tarragona y Turín respectivamente y la pasión que comparten por un mismo estilo musical como es el hardcore punk unió sus caminos en la capital hispalense.
 
 
El trío se mostró en todo momento con muchas ganas de agradar al personal, propósito que consiguieron cumplir. Aunque solo disponen de una maqueta de cinco canciones, extendieron bastante su setlist con temas nuevos y alguna versión. Comenzaron contundentemente con Kaos, a la que le siguió una Muerte con partes más ligeras y rápidas y la reivindicativa Anticristo, toda una “declaración de intenciones”, en palabras de Jose. El estilo de la banda, aunque tiene como base el hardcore punk, bebe de diversas influencias y eso les otorga un sonido más complejo del que suelen tener las bandas de punk. Además, el hecho de que los tres miembros canten, Jose y Gianni alternándose las voces principales en un tono casi gutural y Sergi realizando coros, les aporta más originalidad aún.
 
 
Machakanazis hizo que un pogo invadiera la parte central de la pista por primera vez en el show justo antes de la primera versión que interpretaría la banda: Ratas de ciudad de NON SERVIUM. Posteriormente interpretarían Good Night White Pride del grupo alemán LOIKAEMIE, tras Sabotaje y El Holandés dedicada a la sevillana sala Hollander, que es también local de ensayo y cuna de la mayoría de las bandas underground de Sevilla. Ya para terminar, interpretaron Democracia Represiva y un bis de la anteriormente ejecutada Machakanazis, momento en el que Gianni bajó con su bajo para fundirse con la gente en el pogo.
 
 
Llegábamos así al descanso entre banda y banda, momento en el que vimos aparecer en ambos lados del escenario sendas cabezas gigantes de ratas con los ojos iluminados acompañando así al telón de fondo en el que se podía leer “Rock and Roll for Bastards” y a unos contundentes pies de micro con forma de cadena. RAT-ZINGER estaban al caer.
 
 
El cuarteto vasco no hizo esperar a sus seguidores y sin preámbulo rápidamente saltaron al escenario para interpretar Dios salve a Ronnie Biggs, de su aclamado Rock’n’Roll para Hijos de Perra del que cayeron hasta ocho cortes. 24 componían el setlist de la banda, que demostró desde el primero hasta el último que se ha ganado por derecho propio jugar en las grandes ligas del punk rock y el hardcore nacional dada su intensidad y tablas sobre el escenario, consiguiendo un sonido limpio y muy fiel al de estudio. Su estilo híbrido entre el punk y el metal la hacen además una banda camaleónica y difícil de etiquetar, si bien las influencias de MOTORHEAD son evidentes.

 

 
Fueron cayendo también, como no podía ser de otra forma, muchos temas de su reciente Santa Calavera, como el homónimo nada más empezar o las bien recibidas Golpeando al Hombre Muerto y No Hay Mañana. Una intro de la saga de películas “La Purga” anunciaba el comienzo de No Habrá Piedad Para Nadie y tras interpretar L.E.Y., tema que en su versión de estudio cuenta con la colaboración de Brigi de KOMA, se pusieron unas túnicas negras para tocar Amén y Larga Vida Al Infierno, de su anterior disco titulado de igual forma. Posteriormente rescataron Mi Navaja, de su primer álbum Cartas Al Vaticano, a la que le siguió una versión de Muerte Al Violador, del grupo punk POTROTAINO.
 
 
Sin tiempo para respirar, Narkosanto nos dejó un wall of death en el que se vio involucrado buena parte del público que no dejaría de bailar en todo el concierto. Estábamos llegando al final y claro, RAT-ZINGER no iban a salir de su primer directo en Sevilla sin tocar Rock’n’Roll para Hijos de Perra ni la versión del famoso tema de la banda de Lemmy y los suyos al que han llamado Tenéis Speed?, que terminaron de dinamitar la sala. Con Indestructibles y 9mm finiquitaron el show dejando a la gente con ganas de más aún, pero ya no habría vuelta de hoja.
 
 
Finalizaba así el que para un servidor fue el último concierto de un 2018 repleto de ellos. Seguramente no era el único en esa situación. Sea como fuere, sin duda colmó las expectativas de todos quienes nos encontrábamos. Tras este paréntesis, se reanudaba la Navidad en Sevilla.