Desde Nuclear Blast nos llega un álbum muy esperado, I, The Mask, lo nuevo de los suecos y míticos IN FLAMES, elevando el contador de su carrera a 13 con este LP. El quinteto formado por Anders Fridén / Björn Gelotte / Niclas Engelin / Bryce Paul Newman / Tanner Wayne nos traen 12 nuevos himnos afincados en ese nuevo estilo con el que llevan trabajando los últimos álbumes como Battles, Siren Charms o Sounds Of PLayground Fading, pero dando un pasito más y afianzándose en un death metal melódico y moderno que tan amado es por algunos, como odiado por otros, los más puristas que echan de menos la época de The Jester Race, Clayman o Colony.
Tras más de 20 años una banda ha de adaptarse a los nuevos tiempos y modernizando su música, por ejemplo DARK TRANQUILITY y su discazo Atoma, con elementos modernos mezclados con sus toques clásicos. Quizás el giro de IN FLAMES fue más radical, pero poco a poco va obteniendo su fruto y este trabajo, posiblemente sea el más completo de los últimos tiempos donde la potencia, las melodías y esos toques modernos se compenetran perfectamente, aunque quizás peque un poco de ritmos repetitivos a lo largo del disco completo, que alberga temazos.
Para este álbum se han rodeado de un elenco bestial como el productor Howard Benson, que ha sido nominado en multitud de ocasiones a los Grammy y que ha trabajado con MY CHEMICAL ROMANCE o MOTÖRHEAD. La mezcla ha corrido a cargo de Chris Lord-Alge quien ha trabajado con un rango tan inmenso de artistas que se enmarcan desde CHEAP TRICK hasta LINKIN PARK. Por último, la masterización es para otro peso pesado de la industria, Ted Jensen (PANTERA, EAGLES, GUNS N’ ROSES), obteniendo un sonido limpio, que alberga potencia y agresividad pero con un halo de melodía que guía su energía vital hasta nuestros oídos.
En lo que respecta a lo musical, desde los primeros compases de Voices, ya sabes que estás ante el sonido característico de IN FLAMES (de sus últimos trabajos), sus guitarras en las estrofas suenan bestiales y cortantes, pero guardan una melodía que atempera los estribillos, lo mismo que le ocurre a I, The Mask, con una vuelta de tuerca más en cuanto a agresividad se refiere insertando unos riffs muy grooveros. Y es que la primera parte del álbum es todo un elenco de riffs agresivos y adrenalínicos pero que de seguida pueden resultarte parecidos, otorgándole un peso muy importante a los estribillos limpios y pegadizos como en Call My Name o (This Is Our) House, un tema con un toque más comercial, que en palabras suyas es un himno a levantarse y luchar contra la destrucción del mundo, (los coros finales le dan un toque demasiado moderno y juvenil, creo que sobran).
Hablando de los temas más cañeros que nos quedan aún, aunque ya son pocos, tenemos I Am Above, del que me encanta el riff de guitarra en la estrofa y un estribillo comercial pero efectivo, un corte que podría ser un radio fórmula, por lo pegadizo que se hace con cada escucha. Con Burn, lanzado como adelanto y que llevó a mucha gente a creer que el álbum iba a ir hacia esta vertiente de agresividad y potencia, es un trallazo en toda regla y unas de mis preferidas del álbum, representando lo que IN FLAMES quiere conseguir con su nuevo modern melodic death metal.
El resto de temas, la mitad del álbum, entrarían a formar parte de la parte más melódica y moderna de los suecos, como el medio tiempo Deep Inside que llega a aburrir un poco; We Will Remember engancha con unas melodías vocales que nos demuestran la tonalidad más limpia de Anders Fridén, resaltando su estribillo donde las guitarras dobladas de Björn y Niclas ponen un contrapunto mas heavy; In This Life, se queda un poco corta en composición e interpretación, no aportándole nada al álbum que cierra, mejor dicho me quedaría por mencionar a tres cortes que evolucionan como si de baladas se tratasen, Follow Me, All The Pain y Stay With Me. De las tres, la más atípica seria la semi-acústica Stay With Me, aunque personalmente su toque de modernidad y cierto pop me gustan, como cierre de álbum no encaja, quizás All The Pain, tenga más enganche aunque le falta fuelle, siendo Follow Me la más pegadiza pero los riffs y melodías ya parece que las has escuchado.
En resumen, IN FLAMES ha creado un trabajo con altibajos, con una parte contundente, agresiva y muy enérgica, matizando y recordando de dónde vienen pero modernizando su composición instrumental, con elementos del groove o incluso core, adquiriendo una evolución continua que lleva buen camino. Pero por otro lado, posee una segunda parte de álbum repleto de medios tiempos o temas que actúan como radio formulas o baladas que no acaban de funcionar dentro del estilo de sueco de Gotemburgo, el cual desaparece por completo. I, The Mask es un álbum de temas, como las tres últimos trabajos, donde hay ciertas canciones que destacan sobremanera y muy buenas, pero otras no tanto 6’5/10.
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TRACKLIST
1. Voices
2. I, The Mask
3. Call My Name
4. I Am Above
5. Follow Me
6. (This is Our) House
7. We Will Remember
8. In This Life
9. Burn
10. Deep Inside
11. All The Pain
12. Stay With Me
2. I, The Mask
3. Call My Name
4. I Am Above
5. Follow Me
6. (This is Our) House
7. We Will Remember
8. In This Life
9. Burn
10. Deep Inside
11. All The Pain
12. Stay With Me