El pasado 24 de enero se ponía a la venta Ballistic, Sadistic (Silver Lining Music), nada más y nada menos que el decimoséptimo (17º) álbum de estudio de ANNIHILATOR. Que se dice pronto. Bueno, mejor dicho, de Jeff Waters y compañía. Porque sí, ANNIHILATOR es Jeff Waters. Y Jeff Waters es ANNIHILATOR. De eso no hay duda. La banda, formada en 1984, es un proyecto musical de Jeff que ha ido rodeándose tras estos más de 35 años de músicos de una enorme calidad. El line-up más reciente es el de Aaron Keay Homma a la segunda guitarra, Rich Hinks al bajo y Fabio Alessandrini a la batería. Reconocidos músicos que han participado en otras bandas como Vital Remains, Aeon Zen y Vescera, el proyecto en solitario de Michael Vescera (Loudness, Yngwie Malmsteen).

 

El disco ha sido producido, grabado, editado y mezclado por Jeff Waters (cómo no) en los Watersound Studios de Durham (Inglaterra) a principios de este mismo año. Rich Hinks, su bajista, también ha hecho labores de grabación y edición. Es verdad que el disco podría tener mejor producción, como en sus trabajos de los 90. La batería suena demasiado “robótica” y con poco groove. Las guitarras sin embargo suenan super afiladas e incisivas, eso sí, tal vez demasiado frías y poco dinámicas. En ocasiones da la sensación de haber escuchado algunos riffs en otros temas más antiguos de ANNIHILATOR.

 

El disco es thrash metal directo a la yugular y diría que han endurecido su sonido con este nuevo trabajo. Aquí no hay baladas, intros ni momentos de relax. Un puñetazo en la cara que si tuviera una mejor producción, sería uno de sus mejores discos en estos últimos años. A la altura de Carnival Diablos, tal vez. El disco es implacable y despiadado, no deja pie a poder tomar un respiro, y eso es bueno, ya que Jeff sabe como conjugar la velocidad y agresividad del thrash metal con pasajes melódicos y solos estratosféricos, como en Dressed Up For Evil (con solo de bajo incluído). El disco en general es bastante belicoso y no da respiro. Los riffs aunque parecen a veces “reciclados” de otros trabajos anteriores, suenan marca de la casa y son muy disfrutables. Veloces y con ese estilo que solo sabe darle Waters.

 

 

Respecto a la voz, tengo que admitir que nunca me ha gustado mucho la de Jeff. Pero también tengo que admitir que ha mejorado su técnica y ahora suena con registros más variados. Jeff se anima a jugar algo más con su voz, que, admitámoslo, no es el fuerte de ANNIHILATOR. Así que en ese aspecto, este Ballistic, Sadistic, es una mejora y una subida de peldaño. En resumidas cuentas, es un álbum compositivamente estupendo pero que por algunos defectos técnicos, no llega a ser un discazo, como si lo eran otros como Carnival Diablos o King Of The Kill. Lejos han quedado ya los clásicos ANNIHILATOR. Pese a todo, un gusto seguir escuchando a Jeff Waters en un estado de forma tan fresco. Recomendado. 7/10.

 

Tracklist

1. Armed To The Teeth
2. The Attitude
3. Psycho Ward
4. I Am Warfare
5. Out With The Garbage
6. Dressed Up For Evil
7. Riot
8. One Wrong Move
9. Lip Service
10. The End Of The Lie

Autores:

Redactor y fotógrafo

Rubén Montejo