No es habitual que una banda sea conocida antes de su LP debut, por eso la expectación ante el primer disco de larga duración de los canadienses SPIRITBOX era importante. En su corto periodo de vida, el cuarteto ha publicado dos EP titulados Spiritbox y Single Collection, que les han valido para asomar la cabeza en la escena del post-metal, metalcore e incluso del metal progresivo. Aunque los de Vancouver no eran unos completos desconocidos, ya que, antes de cofundar SPIRITBOX en 2016, tanto la cantante Courtney LaPlante como el guitarrista Mike Stringer estaban en la banda de mathcore Iwrestledabearonce. Jason Mageau, el ex gerente de esta banda, fundó el sello Pale Chord, bajo el que se han lanzado toda la música de SPIRITBOX hasta ahora.

 

Gestado en plena pandemia llega por fin a nuestros oídos Eternal Blue, un trabajo que plasma el momento exacto en el que se encuentra la banda compositivamente y que despeja algunas dudas sobre cuál iba a ser el camino que tomara en este, su primer álbum. Es verdad que su sonido se ha ido haciendo más accesible con el tiempo, abandonando esa suerte de copia de Tesseract que fue su EP homónimo, pero manteniendo elementos prog y hasta djent, que ejecuta con bastante naturalidad. Eternal Blue sigue la estela de los últimos singles publicados por la banda y parece querer crecer a partir de un estilo más personal y diferencial. Por otro lado, aunque las comparaciones con formaciones como Jinjer sean odiosas e inevitables, no son del todo racionales si atendemos exclusivamente a lo musical.

 

Hay que tener en cuenta que Eternal Blue es un disco atmosférico, en el que los sintetizadores hacen lo suyo con bastante clase durante la mayoría de sus doce cortes. Un buen ejemplo de ello es Sun Killer o The Summit, donde aúnan a la perfección electrónica, guitarras djenty y un marcado carácter metalcore, lo que será la mezcla dominante en el álbum. Con todo, la banda ha conseguido crear un registro muy compensado entre partes melódicas y otras más duras, tanto vocal como instrumentalmente. De hecho, solo hay un tema, Holy Roller, cantado únicamente con guturales y que es claramente el más grueso del disco.

 

 

Luego están aquellos temas pensados para funcionar como singles y que, dicho sea de paso, lo hacen a las mil maravillas: Hurt You, Secret Garden o Circle With Me tienen estribillos de esos que difícilmente te puedes quitar de la cabeza. Un coqueteo con el pop que los canadienses ejecutan a la perfección y heredado de bandas como Linkin Park o Bring Me The Horizon, clara influencia no solo de SPIRITBOX, sino de la mayoría de sus grupos homólogos de la escena metalcore. Y la guinda del pastel es la colaboración de Sam Carter de Architects en Yellowjacket, muy acertada, ya que su voz encaja a la perfección en una música que tiene mucho en común con la de los británicos.

 

En definitiva, Eternal Blue es un disco muy compensado con un gran abanico de sonidos y, sobre todo, que entra muy bien. Sin destacar especialmente ante la apabullante avalancha de bandas del género, otorga el placer que dan las cosas bien hechas. Un magnífico primer LP para SPIRITBOX.

 

Tracklist

1. Sun Killer
2. Hurt You
3. Yellowjacket feat. Sam Carter
4. The Summit
5. Secret Garden
6. Silk In The Strings
7. Holy Roller
8. Eternal Blue
9. We Live In A Strange World
10. Halcyon
11. Circle With Me
12. Constance

Autores:

Redactor

Alberto Zambrano