Desde tierras donostiarras, nos llegan los sones de BIERSBREAKER, banda de viking/folk metal creada en los albores de 2010. Después de una década, algunas idas y venidas y una pandemia, han vuelto por la puerta grande y con una sorpresa bajo el brazo. The Power Of The Hammer es su primer LP y encierra tantos secretos como rastros de cerveza. Hoy, BIERSBREAKER responden a Metal Korner.

 

El inicio de un tránsito

 

MK: Para los que todavía no os conocen, ¿Qué es BIERSBREAKER y quién está detrás del proyecto?

 

BIERSBREAKER: Biersbreaker es una banda de folk metal hecha por amigos. Algunos de nosotros nos conocimos tocando en otras bandas y forjamos una amistad que, pese a haber seguido caminos distintos, nos acabó uniendo de nuevo. Y aunque hemos perdido a algunos miembros por el camino, ha sido por cuestiones ajenas a la música, por lo que seguimos manteniendo esa amistad con ellos. Ahora mismo la horda la formamos Mikka (Mikel) a las voces, Nigga (Gonzalo) a la guitarra, Viky (Xabi) a la “gaitarra” (gaita y guitarra), Unai al bajo y Iosu ‘Bizargorri’ a la batería.

 

MK: ¿Con qué tres palabras describirías vuestra música?

 

BB: Cerveza, folk y caña (mira, esta última sirve para música brutal y más cerveza).

 

MK: ¿Por qué escogisteis BIERSBREAKER para nombrar vuestra banda?

 

BB: El nombre del grupo es, después de maquillarlo un poco, como pronuncia un vasco borracho la palabra “berserkr”. Nos dimos cuenta de que sonaba a “beersbreaker” y nos gustó la idea, pero no nos convencía esa doble “e” de “beers”, así que optamos por la palabra alemana “bier”. Sin embargo, el plural en alemán no es “biers”, sino “bierre”, así que tiramos de translator que erróneamente nos identificó la palabra “biers” como danesa, y así lo dimos por hecho hasta que hace un tiempo nuestros amigos de Svartsot (que son daneses) nos explicaron que ellos no dicen “bier” sino “øl”. Todo por intentar darle una explicación o traducción a algo bastante simple: “Berserkr” en euskera borracho se dice “Biersbreaker”. Además de toda esta tontería, nos ha servido para darle nombre al personaje principal de algunas de nuestras canciones, un berserkr muerto en batalla que perdió su espada antes de morir, y por lo tanto, condenado a no poder entrar en el Valhalla, pero que se niega a ir a otro lado, así que vive como un no muerto entre los vivos, maldiciendo a los dioses.

 

MK: Habéis publicado The Power Of The Hammer recientemente. ¿Cómo lo está acogiendo la prensa especializada y vuestros seguidores?

 

BB: Para nosotros ha sido brutal. Hace muy poco tiempo que funcionamos por redes o que tenemos nuestra música en plataformas digitales y a través de Gargoil Tavern Records hemos subido varios singles, pero con el lanzamiento del disco la cosa se ha disparado: mil streamings en la semana del estreno (que para unos desconocidos como nosotros nos parece increíble), se ha triplicado el número de suscriptores, en la primera semana ya teníamos un montón de pedidos del digipack en formato físico. La prensa lo está tratando muy bien. De momento sólo hemos escuchado buenas críticas: Original, fresco, divertido… entre otros buenos adjetivos que lo han calificado. En Inglaterra también está sonando en varias emisoras y también con muy buena acogida.

 

MK: ¿Cómo fueron los procesos de composición, grabación, masterización, etc? ¿Tenéis alguna anécdota que queráis destacar?

 

BB: Los temas se han ido componiendo poco a poco, conforme se nos ocurría una melodía o un riff. No nos pusimos en modo “vamos a componer un disco” y sacar canciones como churros. En este grupo vamos despacio y con calma así que las canciones son más fruto de la inspiración que del trabajo. La grabación fue algo dramática, ya que empezamos en 2018 y al poco de terminar las baterías, nuestro anterior baterista decidió dejar la banda. Seguimos con el proceso de grabación, pero ya tuvimos que empezar a hacer cambios, buscar baterista y la cosa se empezó a alargar. Con el tiempo y con mucho material grabado, nos plantamos en 2019 y se incorporó Iosu a la batería, lo que suponía centrarnos en trabajar con él los temas y regrabarlos a su manera. Y pese a todo esto, parecía que podíamos tener todo preparado para 2020, pero llegó el apocalipsis zombi y decidimos posponerlo. Como anécdota sólo puedo decir que lo hemos masterizado “ilegalmente”.

 

MK: ¿Habéis podido presentarlo en directo?

 

BB: No sabemos si están las cosas para directos. Tenemos muchísimas ganas de volver a los escenarios y descargar con fuerza todo el folk metal que llevamos, pero estamos un poco descolocados porque no nos vemos tocando delante de gente sentada, y ahora que parecía que íbamos a mejor, se está demostrando que vamos a peor, así que de momento seguimos trabajando en el local preparando el show.

 

The Power Of The Hammer, track by track

 

 

 

 

MK: La primera pregunta obligatoria es si estamos frente a un álbum conceptual o si, por el contrario, se trata de un conjunto de canciones unidas por la mitología nórdica.

 

BB: No es un disco conceptual en el que las canciones estén interconectadas entre sí, aunque sí es cierto que algunas guardan algo de relación con otras. Algunas tienen en común la mitología nórdica, pero otras son historias de guerreros borrachos que poca o  ninguna relación tienen con el mundo nórdico, o incluso alguna sale directamente de nuestra truculenta imaginación.

 

MK: Kynni Skepnunnar es la antesala instrumental de la legendaria batalla que se libre en Jormundgand entre la bestia acuática y Thor. ¿Por qué habéis escogido este combo para abrir el disco?

 

BB: En la portada vemos a nuestro personaje principal Biersbreaker arrebatando a Thor el Mjollnir, el martillo y arma más poderoso de los nueve mundos y queríamos contar en estas dos canciones cuán poderoso es el dios del trueno y quién es capaz de derrotarlo: la serpiente Jormundgandr. De esta forma establecemos un paralelismo entre este ser, hijo de Loki e identificado con el mal, y nuestro querido berserkr zombi Biersbreaker.

 

MK: Rock’n’Trolls relaja el ambiente o, mejor dicho, lo vuelve más festivo. Es una oda a dos cosas que, me parece, os gustan bastante: la cerveza y los trolls. ¿Me equivoco? ¿Cómo fue componer este tema que, si me lo permitís, admitiré que me recuerda a las melodías de Finntroll?

 

BB: Sí, tiene mucho de Fintroll pero es por ese juego con melodías “tétrico- infantiles”, en realidad está mucho más inspirado por los trolls de David el Gnomo. Es fruto de estar tocando con un par de cervezas y haciendo el tonto salen estas melodías, simples pero pegadizas que además te permiten cantar encima. Si además añades una letra graciosa en la que unos trolls están de fiesta en el bosque deseando cantar black metal, pues te sale este temón.

 

MK: Aprovechando la pregunta anterior, ¿Cuáles son vuestras principales influencias? ¿Qué os inspira para escribir?

 

BB: En más de un medio ya han visto influencias de Fintroll, Amon Amarth, Ensiferum, etc…, pero hay muchas influencias y de muchos tipos. Para empezar, en BIERSBREAKER a cada uno le gusta algo diferente, desde el rock hasta el death metal técnico, desde el folk tradicional hasta el power metal. En algunas canciones puedes encontrar más thrash metal que es un estilo muy común para casi todos nosotros y que quedó muy patente en el primer disco. En este nuevo trabajo hemos querido buscar un poco más de homogeneidad y sonar más a death melódico… pero nos ha salido esto, je je je.

 

MK: Ravens’ Song habla, creo, de Hunin y Munin, los dos cuervos que creó Odín para que sobrevolasen los mundos de Yggdrassil y le narrasen que veían. ¿Qué destacaríais de este tema?

 

BB: Las melodías de los instrumentos folkis nos parece que han quedado brutales. Es un tema que se compuso sin pensar en ningún instrumento folk, sin embargo, al principio del tema, la voz va en un rollo muy folki, así que con el tiempo vimos la necesidad de introducir algo que le diera ese cariz. Al principio pensamos en nuestra habitual gaita, pero Viky quiso probar a introducir instrumentos del folklore euskaldun y lo hicimos con una dultzaina. Para redondear, también grabamos una zanfona, lo que aumentó ese sonido folki que buscábamos.

 

MK: The Souls Fallen posee una letra bastante mística y existencial, ¿Qué os inspiró a la hora de componerla? ¿Qué mensaje queréis transmitir con ella? Además, ¿es una nueva versión de un tema vuestro?

 

BB: Es una canción que destaca porque se sale de nuestro habitual cachondeo y es un tema viejo que ya se incluyó en el EP Drunken Bards de 2016, pero que no hemos querido dejar fuera de este disco. Hace algunos años salieron a la luz casos de cómo la Iglesia se había “apoderado” de muchos bienes inmuebles a lo largo y ancho de Navarra escriturándolos como propios. Si a esto añadimos los muchos casos que salieron, y que siguen y seguirán saliendo de abusos sexuales, la rabia ante ese falso mensaje de hermandad, paz y amor mientras engordan sus arcas y barrigas a costa de vender algo en lo que no creen nos obligó a predicar en contra de esta hipocresía y a hacer esta canción.

 

MK: ¿Guarda relación The Last Breath con The Souls Fallen?

 

BB: Sí, pero no intencionadamente. Son dos temas bastante coetáneos en el tiempo. Si en Souls of Fallen un guerrero ha sufrido la pérdida de sus valores por los que le impone el cristianismo, en The Last Breath está dispuesto a combatir para mantener su mundo y llevarse por delante a todo aquel que lo amenace. Es una oda a todas las personas que luchan todos los días por aquello que aman.

 

MK: ¿Por qué The Bitchies of Miklagard es uno de los singles del disco?

 

BB: Nos parece un tema muy bailón con esa melodía de influencia oriental, así que pensamos que podía servir de reclamo para el público que no nos conoce, para que vea el carácter festivo y gamberro que nos caracteriza. Además, es un tema con unos cuantos riffs muy thrashers, que como hemos dicho es un estilo con el que nos identificamos todos, así que pensamos que no podía quedarse fuera de los temas que servían para adelantar el disco.

 

MK: ¿Qué podéis contarme de Until The End?

 

BB: Este tema se compuso a raíz de la melodía de la gaita. Viky estaba haciendo el tonto con su gaita atormentando al resto de la banda y de repente surgió la melodía del estribillo. Enseguida vimos que era muy fácil de cantar y el resto de las partes surgieron casi solas.

 

MK: Yo me lo imagino pero los lectores no tienen porqué, ¿Qué historia nos cuenta Hail To Hammer?

 

BB: Cuenta la historia del Mjollnir, el martillo de Thor y de cómo fue forjado para que Loki no sufriera la ira de su hermano el dios del trueno. El dios de las mentiras (Loki), pero también de las travesuras y la astucia, le gasta una broma a Sif, la esposa de Thor, y le corta su preciosa melena. Ante tal afrenta, los dioses deciden castigar a Loki que, para evitar el castigo, les promete unos grandes presentes. Así y a través de engañar a Sindri y a Brokk, unos herreros enanos, se forjan Gullinbursti (el jabalí de Frey), el Draupnir (el anillo de Odín) y por último el Mjollnir.

 

MK: Agrupo Lazybones y Skålananger porque parecen tener un trasfondo común, el broche final de un disco épico y melódico. ¿Qué valor creéis que tienen este tipo de canciones más desenfadadas?

 

BB: Le dan un ambiente más desenfadado y festivo al disco. Sobre todo, en el caso de Skålananger. Este es un tema que partiendo de la cabeza de Gonzalo se fue transformando. Al principio sonaba muy death pero al añadirle el componente folk se transformó, más todavía cuando Eneko, del grupo de folk Briganthya le metió el acordeón. De repente, un tema death sonaba a una “humppa” finesa, era como mezclar Amon Amarth y Korpiklaani en el mismo tema.

 

El final

 

 

MK: ¿Vais o estáis presentando el disco? ¿Cuáles son vuestras próximas paradas?

 

BB: Pues nos pillas sin saber qué decir… nos gustaría presentar el disco, y estamos trabajando para poder hacerlo, pero con esta situación “pandemioapocalíptica” no sabemos muy bien qué hacer. Ya programamos para el 2020 la publicación del disco y tuvimos que echar marcha atrás. Ahora, parecía que las cosas remontaban pero se vuelven a cancelar eventos. Durante este tiempo nos han surgido un par de cosillas, pero de repente había que limitar aforos, luego no se podían celebrar, luego sí. Estamos un poco perdidos y a la espera de ver cómo se va resolviendo todo.

 

MK: ¿Qué planes de futuro tenéis ahora mismo? ¿Estáis trabajando en algo nuevo?

 

BB: De momento estamos preparando el show para estar a punto en cuanto se recupere una situación en la que podamos cerrar fechas sin miedo a cancelaciones y, sobre todo, para tocar delante de un público que esté bailando y bebiendo. Mientras, hemos compuesto bastante material, alguna que otra versión y preparando lo que será nuestra próxima publicación, un remaster de cuatro temas de nuestro primer disco Shout for War que el próximo 2022 cumple diez años.

 

MK: Acabamos, ¿por qué entre todos los estilos escogisteis el viking para vuestra música?

 

BB: No lo escogimos, el viking nos escogió a nosotros, jeje. Al principio no éramos un grupo de viking metal y creemos que seguimos sin serlo plenamente. Siempre hemos pensado que éramos un grupo de folk metal. Muchos de los temas del primer disco no estaban basados solamente en la mitología nórdica, también había mucho de mitología celta, fantasía, etc. De hecho, en los primeros bolos íbamos vestidos con faldas escocesas. Pero la gente nos empezó a llamar vikingos, que hacíamos viking metal, y una cosa llevó a la otra y nosotros encantados.

 

MK: Si queréis añadir algo, este es el momento.

 

BB: Pues daros las gracias a todo el equipo de Metal Korner por darnos la oportunidad de hablar sobre nuestra música y hacernos esta pedazo de entrevista.

Autores:

Redactora y fotógrafa

Pilaria Shephard Djoko