El pasado jueves 17 de noviembre pasó por la céntrica sala La Paqui de Madrid una horda mongola llamada THE HU. Aunque no llegaron a agotar si levantaron una enorme expectación como daba a entender la cola en el exterior y la gran cantidad de gente que vimos una vez dentro de la sala. Comencemos por el principio…

 

En esta ocasión no hubo banda telonera como tal. Jason Cenador hizo de DJ para calentar al personal hasta poco antes de las 21:00. El hecho de contar con un DJ facilitó mucho la adecuación del escenario para el grupo principal.

 

A eso de las 21:00. salieron al escenario los 8 músicos, colocándose en primera fila los miembros oficiales: Enkush (morin khuur principal y canto de garganta), Gala (canto de garganta principal y morin khuur), Jayaa (arpa de boca, flautas y canto de garganta) y Tempka (Tovshuur). Detrás, en un lugar secundario, se desplegaban Davaa (bajo), Odko (batería), Ono (percusión) y Jamba (guitarra).

 

El público se mostró muy animado desde el primer momento sin que se viesen apreturas ni empujones. En Shoog shoog ya empezamos a apreciar una constante: los puños al aire, la agitación de las cabezas hacia delante y detrás y los intentos de corear canciones mongolas con mejor o peor fortuna.

 

 

 

 

A partir de The gereg, ya no quedaba ningún escéptico del hunnu rock. Este grupo tiene un sonido folk muy característico y original gracias a los instrumentos que tocan y a ese canto de garganta que hacen varios de sus miembros.

 

 

Uchirtai Gurav empezó genial con los instrumentos de Ono y Enkush a los que pronto se sumaron el resto de la banda en una de las canciones más festivas y animadas en la que el público no pudo dejar de seguir el ritmo con sus palmas.

 

 

Shireg Shireg tiene un comienzo que te pone la piel de gallina con la flauta de Jayaa sonando maravillosamente, es un tema lento, pero fundamental en su repertorio. En directo sonó igual de bien y es que toda la banda sonó magníficamente durante toda la actuación.

 

 

Pasamos a continuación a otro tema alegrote como es Bii biyelge que fue recibido con grandes muestras de felicidad y acompañado de las palmas del público durante buena parte de la canción además de los tititiririri con los que intentábamos seguir la música.

 

Gala se animó un poco con el español diciéndonos muchas gracias antes de pasar al inglés con Are you having fun? No hacía falta responder porque se veía en nuestras caras y en la gran participación del público.

 

 

Tatar warrior fue la siguiente canción en sonar, un tema que se presta mucho al headbanging, como así hicieron unos cuantos.

 

Si hay dos temas conocidos del grupo estos son Yuve yuve yu y Wolf warrior, ambos de The Gereg (2019), que tocaron en secuencia. Indudablemente ambos temas fueron recibidos con enorme alegría por todos y los coros se hicieron todavía más potentes, aunque (casi) nadie supiera lo que estábamos intentando cantar. Pero… ¿esto era el final del concierto? ¡NO! Todavía les quedaban un par de cartas por jugar

 

 

 

Black thunder y This is Mongol de su último disco Rumble of Thunder (2022) cerraron el concierto. La primera tiene un comienzo lento hasta que se desata toda la furia del trueno en su parte final, mientras que la segunda es un tema más rápido que invita al publico a darlo todo por última vez y cantar Ueueueu.

 

 

Se fueron al camerino, pero gritos y aplausos además del oe oe oe típico español les incitaron a volver. El cantante nos hizo corear One more song… HU! durante un rato hasta que nos dieron el bis. Su bis fue de un solo tema, su recreación del Sad but true de Metallica, cantado íntegramente en mongol.

 

 

Tras este tema se despidieron de nosotros, esta vez de manera definitiva, y enfilamos el camino a casa. Estoy seguro de que nadie salió descontento de la actuación de 90 minutos aproximadamente.

 

Ahora esperemos que nos tengan presentes en futuras giras.

Autores:

Redactor

Mattogrosso

Autores:

Redactor y fotógrafo

Miguel Alegre