Texto: Alberto Zambrano | Fotografías: Rubén Montejo
El pasado sábado brillaba un clima primaveral en Sevilla que no hacía presagiar la tormenta sonora que se iba a desatar en la Sala Custom. Alrededor de medio millar de personas se dieron allí cita para disfrutar de una gira de esas que no se suelen ver por Andalucía. No en vano, tanto HAKEN como BETWEEN THE BURIED AND ME llevan años siendo dos de las bandas más en forma del metal progresivo europeo y estadounidense, respectivamente. Redondeaban el cartel, como banda invitada, unos desconocidos CRYPTODIRA, quienes se encargaron de caldear el ambiente. La gira la organizaba la promotora Madness Live.
Puntual como un reloj, la formación de Nueva York se subió al escenario para deleitarnos con su propuesta durante media hora, aproximadamente. Tiempo que el cuarteto aprovechó al máximo, no parando más que para saludar al público y hacer la clásica presentación de las bandas cabezas de cartel. Su death metal progresivo sonó poderoso y contundente, lo que ganó la atención de la gran mayoría del público que ya estaba en la sala.
Si bien su música incorpora algunos pasajes más melódicos, estamos ante una banda que mayormente usa a la voz growls y que utiliza en sus composiciones los elementos que definen el death metal moderno. La voz principal de Scott Acquavella era acompañada por la de su guitarrista Mike Monaco, formando un curioso dueto.
Venían presentando su segundo disco de larga duración, titulado The Angel of History, el cual copó la mayoría del setlist con cortes como Dante’s Inspiration, con el que abrieron su repertorio, o Something Other Than Sacrifice, que sirvió para cerrarlo. Revisitaron su anterior trabajo y también ejecutaron uno de sus últimos sencillos, Hyperwealth. Se les vio bastante motivados y con una actitud muy positiva sobre el escenario.
Setlist
Dante’s Inspiration
Ontology of Pain
The Blame for Being Alive
Hyperwealth
Something Other Than Sacrifice
Apenas 10 minutos de cambio de escenario y ya teníamos sobre el escenario a los cuatro componentes de BETWEEN THE BURIED AND ME disponibles para esta gira. Y es que el guitarrista rítmico Dustie Waring no viajó con la banda desde Carolina del Norte por motivos de fuerza mayor. Esto obligó a la formación a llevar pre-grabadas las partes de guitarra correspondientes. Un hecho que, si bien se notó, no deslució en exceso la performance de los americanos.
Había ganas de ver a un grupo con más de 20 años de trayectoria y que no se prodiga mucho por España, y menos por el sur. Liderados por un Tommy Giles Rogers que ya peina canas, pero que cuenta con las tablas de la experiencia, el cuarteto actuó con el piloto automático durante su hora y pico de show. Con un repertorio muy enfocado en su último trabajo, Colors II, su concierto fue acorde a las expectativas y se vio a un público muy entregado que disfrutó de las enrevesadas estructuras rítmicas de la banda.
Revolution In Limbo y sobre todo Fix The Error provocaron los primeros pogos frente al escenario, antes de que la formación revisitara Coma Ecliptic con Dim Ignition y Famine Wolf. Casi toda la atención se centraba sobre su guitarrista Paul Waggoner, protagonista absoluto con sus rápidos y difíciles punteos, mientras el bajista Dan Briggs se mantenía discreto a un lado del escenario y Giles Rogers iba alternando su posición entre detrás del teclado y frontman, animando tímidamente al personal. Porque, mayormente, la banda adoptó una actitud bastante fría a pesar de lo caliente que estaba el ambiente.
El clímax de su actuación llegó al final, con una muy celebrada Voice Of Trespass, que con su toque rockandrollero puso patas arriba la sala para que BETWEEN THE BURIED AND ME se despidieran por todo lo alto. Un concierto que, pese a la dificultad de no contar con un miembro del grupo, resultó estar a la altura de lo que se espera de una de las bandas punteras del metal progresivo y el avant-garde metal.
Particularmente, eché en falta algo de representación de sus discos más antiguos y quizás esperaba escuchar algo de Colors. Sin embargo, estamos ante una agrupación que tiene total confianza en su material más reciente y eso lo plasma sobre el escenario.
Setlist
Extremophile Elite
Revolution in Limbo
Fix the Error
Never Seen/Future Shock
Dim Ignition
Famine Wolf
Bad Habits
The Future Is Behind Us
Voice of Trespass
Llegaba el que para muchos era el momento más esperado de la noche. Los londinenses HAKEN están en un estado de forma excepcional y se presentaban en la Custom para defender su ya extenso material. El sexteto ha venido creciendo como la espuma en los últimos años hasta situarse como uno de los referentes contemporáneos del metal progresivo.
La banda británica acaba de publicar hace tan solo unos días Fauna, su séptimo disco. Un hecho que aprovecharon para ir uniformados con camisas con el estampado selvático extraído de la portada del álbum. Era pues, de esperar, que este trabajo tuviese un gran protagonismo en su show. No obstante, este fue compartido con su anterior trabajo Virus, el cual no pudieron presentar con una gira como es debido por culpa de la pandemia.
De esta manera, liderados por un inconmensurable Ross Jennings, comenzaron su concierto con los dos primeros temas de Virus. La potente Prosthetic, de poderosos riffs, dio paso a Invasion, que ya es todo un himno a juzgar por la entusiasta reacción del público. En todo momento se vio una banda que es una máquina perfectamente engrasada, llevando a cabo las interpretaciones con una precisión extrema.
El estilo de HAKEN tiene ese punto más melódico que el de las bandas que precedieron en el escenario, así que vimos a mucha más gente cantando los temas y además con mucha emoción, y es que no se puede negar que la banda británica tiene una capacidad innata para transmitir emociones. The Alphabet Of Me y Taurus fueron recibidas como clásicos a pesar de llevar tan solo unos meses fuera.
Aunque, para clásico, el que nos tenían guardado con Falling Back To Earth, de su ya lejano y aclamado The Mountain. Toda una oda al metal progresivo de más de 10 minutos cuyas estrofas quedaron resonando en la sala de una manera hipnótica. Sin duda, una de las sorpresas de la noche. Otro de los temas más atípicos fue The Endless Knot, de Affinity, igualmente muy bien recibido. El público estaba entregadísimo.
Momento de volver a mostrar en directo parte de su último trabajo, esta vez con un Lovebite más que cumplidor que dejó su lugar a la magistral Carousel, que pasó como un torbellino por la sala. Uno de los temas más aclamados de la noche.
El colofón a una actuación memorable vino con las cinco partes de Messiah Complex, del final de su disco Virus, las cuales hacen un recorrido por algunos pasajes de la banda. Era imposible no quedarse embobado viendo la solemnidad y la absoluta precisión con los que interpretaron estos cortes, como si pretendieran que quedasen ahí para la posteridad. Un final que podríamos calificar también como anómalo para un concierto, ya que no se trata de ningún hitazo. Pero, a pesar de que el público quería y pedía más, los británicos salieron más que victoriosos de una genuina demostración de fuerza y superlativo estado de forma.
Cierto es que los fans más acérrimos echaron en falta algunos hits de la banda que solían estar presentes en sus anteriores giras, como la grandiosa Cockroach King de The Mountain o 1985 de Affinity. Incluso Vector, uno de sus discos más aclamados se quedó sin representación y no pudimos disfrutar de temas como Nil By Mouth o Puzzle Box. HAKEN está apostando en esta gira por sus dos últimos trabajos, cosa totalmente lógica por otra parte.
Setlist
Prosthetic
Invasion
The Alphabet of Me
Falling Back to Earth
Taurus
The Endless Knot
Lovebite
Carousel
Messiah Complex I: Ivory Tower
Messiah Complex II: A Glutton for Punishment
Messiah Complex III: Marigold
Messiah Complex IV: The Sect
Messiah Complex V: Ectobius Rex