Texto: Juan Ángel Martos | Fotografía: Rubén Montejo

 

 

El pasado 18 de abril pasó por Granada una de las giras más potentes de este año 2023, organizada por Kivents, que traería a la Sala El Tren como co-headliners a WARBRINGER (USA) e EVIL INVADERS (BEL), acompañados por SCHIZOPHRENIA (BEL) y MASON (AUS) siendo todo un éxito.

 

Tras cancelar la fecha en Barcelona al tener problemas con el bus del tour, harían paso por Madrid y Pontevedra, descendiendo hasta el sur un martes a las 19:00 horas, hora extraña pero que no echó para atrás al centenar de personas que casi desde el principio se daban cita frente a la sala, doblando la asistencia tan solo una hora más tarde. Y es que era una oportunidad única de ver una gira como esta por Andalucía, donde los cuatro grupos alcanzaron el nivel de excelencia, con un sonido brutal y una actitud plena sobre las tablas, dando igual que fuera un día entre semana, al que asistieron metaleros desde Murcia, Almería o Jaén…

 

 

Con un gran enorme respeto por los horarios, cosa de agradecer, saltaron a la palestra los australianos MASON, banda desconocida para la gran mayoría pero que a buen seguro a partir de este día la tendrán fijada en su reproductor. Y es que desde el comienzo desplegaron una gran energía, en la que su guitarra Daniel Packovski se hacia dueño y señor del escenario, junto a James Benson, voz y guitarra y su bajista, intercambiando posiciones constantemente, saltando, animando… mientras su thrash/groove metal iba animando poco a poco a los asistentes con temazos como Impervious o Martyr.

 

 

Sólo 30 minutos duró el ciclón, pero lo suficiente para terminar por todo lo alto con Tears Of Tragedy y Warhead en la que saltó al escenario el vocalista de SCHIZOPHRENIA, Ricky Mandozzi, para cantar la parte final del estribillo, creando los primeros pogos de la noche. Todo un descubrimiento.

 

 

La tarde se iba oscureciendo y los belgas SCHIZOPHRENIA subieron al escenario con un potente despliegue de death/thrash metal, presentando su ultimo trabajo de estudio Recollections Of The Insane (2022).

 

 

La gira, metía una marcha más, densos y técnicos, el cuarteto belga no dejó pie con cabeza, con un Ricky Mandozzi (voz y bajo) ocupando todo el escenario y cantando en los tres micrófonos que estaban dispuesto en el escenario de la Tren, dejando también protagonismo a Romeo y Marty en las guitarras y a la percusión de Lorenzo mientras sonaban Sea Of Sorrow, la homónima Schizophrenia o Divine Immolation, en las que los circles pits y los pogos ya serian un continuo durante toda la noche.

 

 

Preguntaron al público cuál era su banda preferida si SLAYER o MORBID ANGEL, ganando en vítores los primeros del que interpretaron Necrophiliac, incluida en su ultimo EP de covers Chants Of The Abyss (2023), un buen método para elegir un tema por los asistentes. La intensidad que le ponen a cada corte sobre las tablas y la energía que despliegan, así como sus estructuras cambiantes y rítmicas le dan ese aliciente a SCHIZOPHRENIA para destacar en un estilo un poco más lineal, dejando el pabellón muy alto con Structure Of Death.

 

 

SETLIST: Souls of Retribution – Sea of Sorrow – Schizophrenia – Divine immolation – Onwards to Fire – Necrophiliac (Slayer cover) – Cranial Disintegration – Structure of Death

 

 

Las 21:00 era la hora señalada para cambiar de registro y dar paso al primer cabeza de cartel, los belgas EVIL INVADERS que venían presentando su nuevo trabajo Shattering Reflection y que desplegaron un show/espectáculo de 10, con un juego de luces impresionante, un atrezzo de stage que envilecía el ambiente desde su logotipo iluminado hasta los pies de micros con puñales giratorios y la pirotecnia pertinente. Si todo esto lo rematamos con thrash, speed y heavy metal, tenemos un combo infalible, como el concierto que dejaron en Granada.

 

 

Con un comienzo abrumador comandado por Feed Me Violence y Mental Penitentiary, disfrutadas al máximo por el público, alternaron con In Deepest Black una balada como las de antaño muy onírica y emotiva, para desplegar su rabia speed/heavy de nuevo dejándonos temazo tras temazo: Sledgehammer Justice, Die For Me o Pulses Of Pleasure, con un Joe (voz y guitarra) descomunal y un combo perfecto formado por Max y Joeri, cerrando el círculo la percusión de Senne llevando en volandas a los asistentes hacia Raising Hell como colofón a un concierto que será recordado.

 

 

SETLIST: Feed Me Violence – Mental Penitentiary – Hissing In Crescendo – In Deepest Black – Sledgehammer Justice – Forgotten Memories – Die For Me – As Life Slowly Fades – Pulses of Pleasure – Fast, Loud ‘n’ Rude – Raising Hell

 

 

Y si EVIL INVADERS dieron un conciertazo, los descomunales californianos de WARBRINGER no serían menos, con seis álbumes a sus espaldas y en activo desde 2005, era una oportunidad única para verlos por estos parajes granadinos y gozar de su thrash metal en toda regla, porque tienen otro directo arrollador más analógico, pero igual de efectivo.

 

 

John Kevill (voz) tiene una enorme presencia en el escenario, las guitarras y coros de Adam Carroll y Chase Becker te fusilan sin cesar y la base creada por el bajo de Chase y la percusión de Carlos Cruz, hacen que el quinteto americano arrolle por donde vaya. Si a esto le sumamos el feeling constante que mantienen con el público (John acabó el concierto bajándose del escenario para saludar y fotografiarse con todos los fans) y su thrash con tintes old school pero pasado por un filtro del siglo XXI, que demandan cortes como Woe To The Vanquished, Living In A Whirlwind o Defiance Of Fate, cerrando el espectáculo con un combo antibélico como Combat Shock y Total War, dejaron la noche como empezó, por todo lo alto.

 

 

Por supuesto no faltó la rítmica Remain Violent, uno de sus himnos y con sonido y estilística más old-school. Su baterista Carlos Cruz hizo todo un recital de cómo aporrear los parches en una banda de thrash metal americana. Actitud, técnica y pegada llenaron de pogos y headbangs la Sala El Tren. Uno de los conciertos de thrash metal del año, sin duda. Brutal.

 

 

Tenemos que dar gracias a Kivents por acercar al sur estos grandes eventos, una apuesta algo arriesgada pero ganadora y ojalá haya más promotoras que apuesten por Andalucía para giras de este nivel, que a nivel de producción, de profesionalidad y de calidad alcanzan el sobresaliente en una noche que será recordada por todo y cada uno de los asistentes. No es fácil meter a 200 y pico personas un martes a las 7 de la tarde en una ciudad relativamente pequeña, como Granada.

 

Podéis ver el resto de fotografías en Rubén Montejo MusicPhoto

 

¡Nos vemos en la próxima!