Por Rafa González, con fotos y ayuda de Erik Gustafsson

 

 

El sábado 23 de marzo, antes de que empezara el concierto encabezado por NECROPHOBIC (crónica aquí), tuvimos la oportunidad de hablar con tres de los miembros de la banda de black metal sueca MYRONATH. Esta entrevista se realizó en inglés y ha sido traducida al español. Aparte, la mayoría de respuestas se han redactado en tercera persona, aglutinando las tres voces en una sola.

 

Metal Korner: Buenas tardes, gracias por atendernos. En primer lugar, me gustaría preguntaros cuánto tiempo lleváis con la banda.

Myronath: La banda fue formada en 2019 a partir de que Hellcommander y Bjarkan se conocieran a través de un amigo común. A pesar de que Hellcommander se quería tomar un descanso del mundo musical después de que uno de sus excompañeros se mudara y perdiera el interés en seguir tocando juntos, cambió de idea cuando se intercambió un par de riffs con Bjarkan. Continuaron con ello, y en dos semanas ya tenían un álbum entero compuesto. «Estaba destinado a que ocurriera», afirma Hellcommander.

 

MK: Leí en la página Black Metal Spirit que practicáis el ocultismo y veneráis a La Muerte. ¿Podríais explicarnos más concretamente cuáles son vuestras creencias?

M: Hellcommander es quien escribe las letras, y se basa en sus creencias y prácticas personales, que expresan su devoción por La Santa Muerte. Es una manera de canalizar su energía con lo supernatural. El hombre siempre ha utilizado la música para conectar con lo divino.

 

MK: ¿Vuestras creencias se podrían considerar satanistas?

M: Nosotros nos basamos en The Left Hand Path, que no es realmente satanismo, sino culto a la muerte; cosa que está muy conectada con El Kabbalah y el Qlippoth. Pero para los medios mainstream todo es satanismo.

 

MK: Entonces no está muy relacionado con la filosofía de Anton Lavey, ¿cierto?

M: No realmente. Está relacionado con los poderes de La Muerte.

 

MK: La Santa Muerte es principalmente venerada en barrios más bien marginales de México, país con una fuerte tradición católica y donde el metal no se estila demasiado. ¿Crees que hay unos estilos musicales mejores que otros para conectar con deidades como La Santa Muerte?

M: Al final lo más importante no es la música en sí, sino el individuo que la toca. He hablado con muchos fieles de La Santa Muerte, la mayoría no escuchan metal y se consideran católicos. Sin embargo, yo no creo que haya una verdadera conexión entre el catolicismo y La Santa Muerte. Creo que dicha relación es fruto del miedo de muchos fieles mexicanos de ser rechazados por la sociedad en la que viven. Realmente La Santa Muerte tiene origen en la Europa de la peste negra, cuando los artistas comenzaron a representar la plaga como una figura esquelética. Más tarde se exportó a México, donde actualmente cuenta con más de 4 millones de devotos.  «Yo he sentido su presencia. He leído libros al respecto y hasta tengo un altar. Soy un fuerte creyente», aclara Bjarkan.

 

 

MK: Pasando a otro tema: Hellcommander, tú vienes de Malta. ¿Qué opinas de la escena musical de allí?

M (Hellcommander): La escena metalera de Malta es estrecha. Es un pequeño país con muchas bandas donde todos se conocen entre sí. No hay muchos grupos grandes. Es complicado para las agrupaciones de Malta lograr exposición. Tienes que trabajar duro. No es como Escandinavia y Alemania, que son el centro europeo del metal.

 

MK: ¿Podrías recomendarnos algunas bandas de Malta?

M (Hellcommander): Por ejemplo MARTYRIUM, banda de symphonic black/death metal, o BEHEADED, death metal. También KILLERWITCH.

 

MK: Vosotros recalcáis que tocáis black metal al estilo sueco. ¿En qué se diferencia el black metal sueco del noruego? 

M: El black noruego es más frío y su producción es más cruda. El black sueco es más melódico y agresivo. NECROPHOBIC es un buen ejemplo de black metal sueco.

 

MK: ¿Tenéis algún ritual antes de subir al escenario?

M: Realmente, ritual es lo que hacemos en el escenario. Solo seguimos la tradición del corpsepaint, que nos ayuda a sacar la bestia que tenemos dentro. Es como la pintura de guerra. «Yo lo que hago antes de tocar es irme tranquilo a solas para entrar en el adecuado estado de ánimo», añade Hellcommander.

 

MK: ¿Cómo de importante es mantener la estética clásica del género para vosotros?

M: La imagen no lo es todo, pero es muy importante. Tienes que dar un show encima del escenario. Es como ponerse la armadura antes de una batalla. No vas a ir a la guerra en bañador… Cada uno que haga lo que quiera. Nosotros hacemos lo nuestro y nos da igual lo que piensen los demás. Nosotros personalmente no concebimos subir a tocar sin maquillaje, y los chalecos que llevamos nos aportan unidad. En el black metal estas cosas entran dentro del paquete. 

 

 

MK: Para finalizar, ¿Qué novedades tenéis para anunciar?

M: Nuestra próxima actuación será en un festival en Estocolmo el día 27 de mayo, y más tarde actuaremos también en un nuevo festival en Västerås. Estamos muy ilusionados. Es una nueva iniciativa, por lo que esperamos que funcione bien y se llene de gente.

 

Aparte, para cuando salga esta entrevista ya habremos sacado el primer single de nuestro próximo álbum, Inferno. Este será distinto de los dos anteriores, sobre todo en cuanto a las letras. Esta vez en lugar de ir sobre La Santa Muerte, va sobre el Infierno de Dante, pero desde la perspectiva de The Left Hand Path. Es una reinterpretación de la Divina Comedia donde Satán representa la libertad de ser uno mismo, en lugar de una cosa demoníaca. Al contrario de lo que promulga la Iglesia, debemos abrazar nuestra condición de pecadores. Sin los deseos que encarnan los siete pecados capitales, seríamos como zombies.

 

 

Esto es todo, os dejamos con el single mencionado por la banda.