Por Toni Skwigelf
Buenas, hoy os traigo más material nacional curioso que seguro que os gustará: desde la sierra madrileña vienen VIERNES TROZO. Resurgidos a partir de la antigua banda Trashtorno, estos madrileños vienen dando guerra con su segundo trabajo. Anteriormente, en 2013, lanzaron “Se Veía Venir”.
El grupo está compuesto por Abel del Fresno (Batería), Gonzalo Arce y Uge (Voces), J.J Mayayo y Roberto Molero (Guitarras) y Tripi (Bajo). Su estilo se define con una mezcla de metalcore, rap y rock, por lo que la variedad está presente a lo largo de su obra.
Pasando a comentar ya su último trabajo, “Pena de Mente” se lanzó el 4 de abril de 2016. Está grabado, mezclado y masterizado por Pablo del Fresno en Cercedilla (Madrid) y el artwork de la portada está hecho y diseñado por los propios Viernes Trozo. El álbum tiene 9 cortes, que comento a continuación:
Empezamos con “Maldita Naturaleza”, donde desde el primer riff se empieza a notar la influencia rockera, a la par que los vocales le dan el lado de rap. Las letras pegan con fuerza, y la base musical está genial, mezclando diferentes estilos pero haciéndolos uno con un toque personal. Si te molan el rollo de Narco o de Marabunta, estos te van a gustar.
Seguimos con “Efectos Secundarios”, donde el bajo y la batería abren de principio. El bajo de Tripi es quién maneja el tema en su totalidad, sin desmerecer el resto. Sigue en la misma línea, tal vez este tema tenga hasta más de metal que de rock en cuanto a la instrumental, depende del punto de vista.
Continuamos con la reivindicativa “Protestas”, un corte más pesado, en la línea del metal estilo Groove. Los riffs son brutales, directos al pecho. Este tipo de temas predominan en todo el LP, propuesta particular pero que al menos, como opinión personal, me fascinan.
Después de esta aparece “Campos de Trabajo”, misma temática y con colaboración del rapero Awes. Uno de mis cortes favoritos del disco sin duda, define muy bien lo que los chicos de Viernes Trozo quieren hacer y expresar con su música, no te desengaña desviándose de su mezcla.
Llegamos a la mitad del disco con un riff de guitarra introduciendo a “Ácido”, tema más rápido en cuanto a la línea del disco. Este tema de seguro que en directo arrancaría más de un pogo, la batería de Abel se desenvuelve fantástica.
El siguiente tema es “Un Número Más”, donde volvemos un poco a la línea instrumental más rockera, pero sin perder el toque “heavy”. Las voces de Gonzalo y Urge se intercalan bien y le dan un buen toque, con agresividad y fuerza expresando cada palabra.
Abriendo de nuevo un riff de guitarra, avanzamos con “Sin Mirar Atrás”. Las hachas de J.J. y de Roberto hacen buen cometido durante todo el álbum, dirigiendo en casi todos los temas y haciendo la instrumental una parte indispensable de este álbum. Sigue en la misma línea de letras de reivindicación de protesta y justicia social, por lo que si buscas el cliché de la vida de superestrella esta no es tu banda.
Llegando al final tenemos a “La Educación”, con las guitarras abriendo una vez más. Realmente, este disco me atrae porque a la vez que disfrutas de buena música te conciencias, por lo que la labor del grupo, no solo de ejecutar su arte sino encima de transmitir bien un mensaje es de destacar.
Finalizamos con “Vigila tus Espaldas”, un broche perfecto sin sobresaltos, con la misma rabia y fuerza que a lo largo del disco aun teniendo un interludio más tranquilo, directo a la barbilla y con un último mensaje de protesta, los chavales de Viernes Trozo no tienen pelos en la lengua, jeje.
Pasando a aspectos más generales, qué decir más. Este tipo de música poco a poco se está popularizando, cosa bastante buena, ya que en este país hace falta que la gente se exprese, que la gente muestre su rabia y descontento por lo que ya sabéis, disfrutad de la buena música y concienciaos de lo que pasa a vuestro alrededor, no será por falta de grupos. A este disco le doy un 8,5/10 y os lo recomiendo, no le hagáis ascos a ninguna mezcla, la música es música y hay que valorarla siempre.