Estuvimos en una nueva edición del ya veterano ESTAKA ROCK FESTIVAL, que se celebra en la localidad jiennense de Jódar. Nos desplazamos desde la capital, Jaén, y desde Motril para cubrir el evento. El cartel, a priori, era atractivo y variado, teniendo sonidos punk, rock y metal. El festival tiene una buena organización, autogestionada, además de contar con la colaboración del ayuntamiento.
El sonido en términos generales fue aceptable, con altibajos dependiendo de la banda. Algunas sonaron más correctas que otras. Pero consideramos que es un punto a mejorar en sucesivas ediciones. Bandas de tal calibre como las que actuaron no merecen un sonido que no cumpla con los requisitos. Pese a todo, la balanza se inclina más hacia el lado positivo.
En barra, los precios eran muy populares, con cervezas a 1,50€, cubas de calimocho a 4€ y bocadillos a 1,50€. El escenario era completo y estaba bien montado, aunque hay que decir que es muy alto y tiene una zona hundida a modo de foso medieval (una planta) entre el propio escenario y el público, que sumado a las vallas colocadas delante, supuso una doble separación que hizo bastante complicada la tarea de fotografiar a las bandas, así como conectar y tener cercanía con el público. Pero de sobra es conocido este tema, que podríamos decir es de los pocos talones de Aquiles del festival.
La banda de punk-rock TUMBABIRRAS, con miembros de varias localidades de Jaén, fueron los encargados de la difícil tarea de abrir el festival. Con aún muy poco público, comenzaron unos minutos después de la hora estimada. Su apuesta es un punk rock muy combativo y reivindicativo, con grandes críticas sociales a temas de candente actualidad, como la tauromaquia o la monarquía, entre otros temas recurrentes del estilo.
El sonido, al ser la primera banda dejó bastante que desear, sobre todo en los primeros temas, como Puto vecino o Vagabundo. Poco a poco fue mejorando. La banda, consistente en un power trío, fue escupiendo su crítica social al aún escaso público que estaban en las primeras filas. Sirvió para calentar el ambiente y poder hacer contacto con las infraestructuras del festival. Me quejo por gusto o Hasta las pelotas fueron dos de los temas que sus seguidores más corearon.
En definitiva, un concierto correcto en actitud y profesionalidad, pero un poco flojo en el aspecto sonoro, cosa poco reprochable a la banda, que estuvo correcta en todo momento. Tal vez les falte más ensayos y experiencia, ya que se ve una banda muy joven, con ganas y energía, pero con falta de veteranía. Buen comienzo de festival, que supuso un pistoletazo combativo y calentó a las primeras personas que se acercaron a Jódar.
Setlist:
1. Tumbabirras
2. Puto vecino
3. Vagabundo
4. Entre aldones
5. Me quejo por gusto
6. Taurinos
7. Hasta las pelotas
8. Cancer
9. El rey
10. Luché y sueño por ella (Asto Pituak)
Con la luz diurna todavía presente de un sol que comenzaba a esconderse por Sierra Mágina, saltaron a la palestra LOS MAKIS. La banda local afincada en Jódar, salió ante un público todavía no muy numeroso que iba creciendo poco a poco. El power trío formado por Godoy al bajo y a la voz, Fran a la guitarra y los coros, y Carmen a la batería salieron con ganas de dar mucha guerra.
Con una mezcla de rock urbano muy influenciado por bandas de heavy metal de los ochenta y también de punk rock, desplegaron todo su potencial sobre el escenario del festival. Armados con sus instrumentos, vinieron cargados de letras afiladas de tono reivindicativo que no dejaron de lado temas tan actuales como el franquismo, el machismo, la tauromaquia o la corrupción entre otras tantas injusticias.
Nos abordaron con un bloque compacto y sin muchas florituras que sirvió al público de toma de contacto con la banda, que poco a poco se fue metiendo en el concierto y consiguió conectar con parte de los asistentes, pues el resto seguían llegando al recinto y se repartían entre las barras y los puestos de merchandising de la terraza superior. El buen sonido se hizo presente, mejorando respecto a la actuación anterior. Canciones como Todo va igual, Fiesta Tortura o Política Puerca con la que cerraron consiguieron terminar de calentar a la gente.
Setlist:
1. La tierra
2. Eskirol
3. Sin fronteras
4. Amnesia histórica
5. Adicto
6. Stop machismo
7. Todo va igual
8. Fiesta tortura
9. Política puerca
Más tarde saldría uno de los platos fuertes y reclamos del festival. La banda tiene músicos de Jaén y Granada y practican una mezcla de doom y stoner metal contundente y sin tapujos. Con más de 10 años de experiencia, interpretaron al completo su último trabajo discográfico, Dölmenn (editado en 2016) y añadieron el tema Iron and Wood de su anterior trabajo homónimo, editado en 2012. Ambos trabajos fueron lanzados a través de Discos Macarras, recibiendo grandes comentarios por parte de la prensa especializada.
Javyer como frontman fue devastador con su voz grave y rasgada, agrediendo sónicamente al ya más numeroso público. Su actitud fue bastante activa y agresiva, animando continuamente al público con sus gesticulaciones, haciendo air-guitar y usando el pie de micro a modo de garrote vil. Aunque el sonido en CABEZA DE CABALLO no fue totalmente correcto y sonó demasiado embarullado, no les vino del todo mal, por practicar un estilo musical donde prima el grosor y la densidad del sonido.
Por otro lado hay que destacar a Miguel a la guitarra, desbordando su energía a través de las 6 cuerdas. No paró ni un solo segundo. El headbanging y el movimiento fue la tónica general de su actitud encima de las tablas, respondiendo y haciendo una buena retroalimentación con el público, que poco a poco empezaba animarse con los sonidos fangosos de Cabeza de Caballo. La parte rítmica fue también demoledora, con un bajo monstruoso y una batería percutora.
Resumiendo, uno de los mejores conciertos de la noche, cargado de energía y buenas sensaciones. Es una banda que suena muy compacta y que tiene una puesta en escena cuidada y poderosa. Habrá que estar atentos a la evolución de la banda y sus futuros proyectos musicales.
Setlist:
1. Iron and wood
2. Last words of Walter Kovacs
3. Watheley’s baby
4. Dölmenn
5. Cahrahb
Llegó otro de los momentos más esperados por el público de Jódar. ANKHARA, la mítica banda madrileña de heavy power metal hacía aparición. Con una impresionante carrera musical que roza los 25 años de historia, llegaban a tierras jiennenses presentando su última obra discográfica Sinergia, lanzada el pasado mes de mayo por Rock Estatal Records.
Eran muchas e intensas las ganas de ver a los madrileños por el público galduriense. La banda presentaba disco tras 15 años de su última obra, Sombras del pasado, pero aunque había muchas expectación por verlos actuar, las tornas cambiaron, convirtiéndose en una decepción.
Como se dice por estos lares, “se juntó el hambre con las ganas de comer”. Hubo diversos factores que convirtieron el concierto de ANKHARA en un despropósito. En primer lugar, el sonido, en los primeros compases de su actuación, fue bastante lamentable, con continuos problemas en la guitarra de Cecilio y en el micrófono de Pacho Brea. Poco a poco se fueron solucionando, aunque la banda no llegó a disfrutar de un buen sonido en ningún momento. Por otro lado, todo el público y la prensa especializada que estábamos allí presente, notamos una actitud frente al micrófono de Pacho Brea un tanto extraña. No sabríamos decir si estaba bajo de ánimos o con otro problema, pero no llegó a conectar ni a divertir en ningún momento al público.
Continuos ademanes de enfado hacia su micrófono y el cable hicieron que en un momento el micrófono cayese al foso, no sabemos si de forma voluntaria o no. Cara de pocos amigos, continuas frases reiterativas como ese “¿estáis ahí o qué?” que llegó a hacerse una coletilla cansina o algunos gestos de poca complicidad con el resto de la banda hicieron que se crease una atmósfera malsana dentro del público, que asistía sorprendida por el espectáculo encima del escenario. Incluso pudimos leer de sus propios labios un “su puta madre”. No disfrutó del concierto y eso se vio reflejado en su trabajo a la voz, que fue a medio gas, sin convencer en absoluto.
A todo ello se unió otro factor más, que creo que es de importancia. ANKHARA desplegaba su show con dos músicos sustitutos. No estaban con ellos ni Alberto Marín ni Matías de Vallejo, dos miembros esenciales y que aportan ese toque convincente a la música de la banda. Aunque el baterista sustituto hizo un buen trabajo, se le notó tenso, poco a gusto y con cierto nerviosismo. Por otra parte, el guitarrista sustituto de Alberto Marín, aunque técnicamente fue correcto, pecó de pasividad, no aportando esa visibilidad que se espera de un gran guitarrista de heavy metal. No hubo la complicidad dentro de la banda que ha habido en otras ocasiones, tal vez en parte por ser tan recientes estas sustituciones.
La unión de todos estos factores deslucieron el show de ANKHARA. De una banda llena de grandes músicos, como hemos podido disfrutar en directo anteriormente, se espera algo más del espectáculo que presenciamos esta noche. Tratándose de una de las bandas más queridas y con mejor sonido de la escena heavy metal español, esperamos poder volverlos a ver en directo y resarcirse de esta mala noche. Una mala noche la puede tener cualquiera. Los temas del nuevo CD que interpretaron como Te toca sufrir o Sigo en pie sonaron prometedores, aunque tristemente deslucidos. Esperamos poder disfrutar de Sinergia en directo muy pronto. ¡Mucho ánimo y suerte!
Setlist:
0. Intro
1. Te toca sufrir
2. Demasiado tarde
3. Una paso más
4. Libertad
5. 3:40
6. No mires atrás
7. Sigo en pie
8. Ayúdame
9. Óceanos de lágrimas
10. Hasta el fin
11. Acordes mágicos
Ya en el ecuador del festival era el turno de la artillería pesada, ni más ni menos que una leyenda del rock patrio como son PORRETAS. La banda con más de treinta años ya sobre los escenarios (treinta y tres para ser exactos) es todo un referente dentro del rock nacional.
El cuarteto de Hortaleza vino cargado de historias de barrio directas y sin complicaciones que consiguieron enganchar desde el primer momento a todos los presentes, con canciones como Hortaleza, En mi barrio o La del futbol, por ejemplo, algunas ya convertidas en grandes clásicos. No faltaron otras llenas de melancolía por los “buenos” tiempos como Y aún arde Madrid o Última generación. Pero sobre todo con ganas de juerga y llenas de rock and roll, que consiguieron convertir su actuación en toda una fiesta, pues tuvieron una gran acogida por parte del público, desde los más fieles hasta los más novatos.
Con dos discos de versiones de grandes canciones de otros géneros y otros tiempos en su discografía como son Clásicos I y Clásicos II, no podían faltar tampoco sus visiones personales de alguna de ellas, como por ejemplo Insurrección (El último de la fila) o Resistiré (Dúo Dinámico), dos temas prestados hechos suyos y convertidos en himnos propios. Otra que no podían dejar sin tocar fue, esta vez si todo un himno propio, la conocida Marihuana.
Nos demostraron que a pesar de los años la banda se encuentra en buen estado de forma, con los incombustibles Bode y Pajarillo a la voz, bien acompañados del gran guitarrista Manolo Benítez a los coros y Luis a la batería. La llama inconformista del rock y del punk presente en canciones como Jodido futuro, todavía sigue muy viva en ellos. Así que todavía nos queda PORRETAS para rato.
Setlist:
1. Hortaleza
2. Jodío futuro
3. Joder que cruz
4. Jodio el pueblo
5. Tripis
6. Última generación
7. Resistiré (Dúo Dínamico cover)
8. Y aun arde Madrid
9. Insurrección (El último de la fila cover)
10. El deudor del condado de Hortaleza
11. En mi barrio
12. La del futbol
13. Si lo se me meo
14. Marihuana
15. Porretas + La ley de Benny Hill
Les llegó el turno a los reyes del thrash metal español, una de las bandas más esperadas del festival, los internacionales ANGELUS APATRIDA. Pese a tratarse de una de las bandas más importantes de nuestro país y fuera de él, que perfectamente podría haber liderado al resto de las bandas que se dieron cita esa noche, respetuosamente cedieron el puesto a sus antecesores, los ya veteranos PORRETAS.
Con un gran álbum recién salido al mercado como es Cabaret De La Guillotine, que sigue arrasando y ha tenido una gran acogida tanto por parte de los medios especializados como por parte del público, eran grandes las ganas que teníamos de ver plasmados sobre el escenario los temas nuevos de este. Y la verdad es que no nos dejaron indiferentes.
Tanto One Of Us, con la que abrieron el concierto, o The Hum, bien intercalada en mitad de su actuación, sonaron con la contundencia que se espera de una de sus canciones, con esa potencia en la batería que intenta arrancarte el corazón del pecho y esos marcados cambios de ritmo bien dirigidos por las guitarras, que te lanzan directo dentro del circle pit. Si le sumamos la agresividad de Guillermo a la voz, se convirtieron en dos canciones que hayamos escuchado toda la vida en sus directos.
Nos quedamos con ganas de ver Farewell en directo, para nuestro gusto también uno de los mejores cortes del álbum, pero sería imposible meter en un show de una hora todas las grandes canciones que tiene la banda, que en este caso son muchas. Los que sí que estuvieron presentes fueron los dos primeros singles que nos adelantó la banda: Sharpen The Guillotine y Downfall Of The Nation. Las dos sonaron brutales.
Junto con la buena actuación a la que nos tienen acostumbrados el trío de mástiles de la banda, cabe destacar la actuación de Adrián Perales, que sustituyó al su batería habitual Víctor Varela, todavía convaleciente (desde aquí le deseamos una rápida mejoría y verlo pronto sobre los escenarios de nuevo). Al igual que en su actual grupo IN MUTE, Adrián supo adaptarse rápidamente y de forma sobresaliente al nuevo setlist. Y de qué manera lo hizo. Se notó que hizo los deberes y aprobó con muy buena nota, tanto que fue de los que más disfrutó el examen.
Por lo demás gozaron del sonido más limpio de la noche junto con el de PORRETAS, desplegando una buena actuación con canciones como Inmortal, Vomitive, Violent Dawn, o Give´em War entre otras, dando un repaso a su discografía. Consiguieron que el público se entregara y disfrutara de lo lindo. Cerraron con otra fija ya como es You are next, con selfie incluido de Guille, demostrando que no solo son unas máquinas de beber cerveza (que también lo son) si no una de las bandas más grandes que ha dado nuestro país. Un máquina bien engrasada muy en forma tanto en directo como en estudio.
Tras pasear la guillotina del thrash metal por Jódar, se fueron con unas cuantas cabezas más de seguidores en su haber.
Setlist:
1. One Of Us
2. Inmortal
3. Sharpen The Guillotine
4. Vomitive
5. Of Men and Tyrants
6. The Hum
7. Violent Dawn
8. Downfall of the Nation
9. End Man
10. Give’em War
11. You Are Next
Tras su actuación, hubo un poco de estampida por parte del público, algunos un poco cansados y otros (como nosotros) que tuvimos que coger bus organizado desde Jaén, pues tenía la vuelta programada 15 minutos después de finalizar ANGELUS APATRIDA. Aunque nos hubiera gustado, no pudimos disfrutar del final de fiesta preparado por la organización con el grupo de versiones AMAMARLA, o “Tu karaoke punk rock” como se denominan ellos, y ASPERO Y EL PEINE DE ESPARTO. Pero estamos seguro que tantos los valientes que se quedaron, como la gente del pueblo que entro posteriormente (pues abrieron las puertas a todo el público) se lo pasarían genial.
Nuestro balance general un año más vuelve a ser positivo. Siempre hay alguna cosa que pulir y mejorar, como por ejemplo el tema del foso que comentábamos al principio. Pero podemos asegurar que ya se está trabajando en esos detalles de cara al año que viene.
Como exponíamos anteriormente, salvando la actuación de algún grupo que pensamos que pudo ser mejorable, y algunos problemas de sonido puntuales durante el festival, por lo general en los demás aspectos podemos hablar de todo un éxito. Grandes grupos, buen ambiente, precios populares tanto en entradas como en barra… Se nota cuando una organización y todo un pueblo se vuelcan con un festival de forma desinteresada, y esta vez ha sido una de esas. Esperamos la llegada del próximo ESTAKA.