Review: LORD OF THE LOST, brillantes con “Thornstar”

 

La primera canción es On This Rock I Will Build My Church. Los alemanes la publicaron haces unos meses y nos dieron el placer de poder escucharla. Comienza fuerte, con Chris Harms repitiendo esta frase en gutural a la par que las guitarras y las baterías truenan al unísono. Los teclados le dan un toque muy característico del sonido de esta banda que hemos podido escuchar en antiguos trabajos como en Empyrean. Es una canción muy cañera, con muchísima distorsión tanto en las guitarras como en el sonido de los sintetizadores, que se acoplan muy bien a los guturales de Chris. La mejor manera posible de poder abrir este disco.

 

Le sucede Loreley. Bastante más relajada que la anterior, los sintetizadores tienen especial importancia en esta canción. Podemos disfrutar de esos susurros en gutural del frontman y unos ritmos de guitarra bastantes sencillos, además de una batería perfectamente acompasada y muy cañera. En una parte de la canción, el ritmo aumenta, con altos guturales, sintetizadores mucho más oscuros y un doble bombo espectacular. Está basada dentro de la mitología de G’hahyr, en la figura de Loreley, que es una semidiosa referida al espíritu del Sol o a la guardiana del fuego. Solo los demidioses están en contacto con Morgana y Haythor. Es el nexo de unión entre Morgana y los humanos. Está representada con cuatro brazos y una aureola en la cabeza, formada por lanzas o flechas que le atraviesan el cráneo.

 

La tercera canción es Black Halo. Comienza con un cuarteto de cuerda, seguida de golpes en el bombo de la batería. De nuevo, una canción algo lenta, pero está tan producida que es imposible centrarse en una sola melodía. Todo se ejecuta a la perfección, las baterías digitales le dan un toque fuerte pero los sintetizadores envuelven el sonido como si de verdad fuera el halo del que hablan. Las guitarras y el bajo pasan a un segundo plano. En ocasiones, uno de los teclados me recuerda a DEPECHE MODE. 

 

La siguiente es In Our Hands. Nada más comenzar te viene a la cabeza JOY DIVISION. Es una canción oscura, lineal, la distorsión de las guitarras abrazan y rodean el sonido dándole ese toque de oscuridad anteriormente dicho. Se notan las influencias del rock gótico de los 80 pero adaptándolas al sonido del siglo XXI. Se juegan con submelodías de teclado en los distintos ritmos de guitarra y bajo. 

 

La quinta canción es Morgana. Lo más característico es el teclado y el doble pedal al mismo ritmo, así como los cortes del estribillo. Los guturales del estribillo rasgan y rompen de manera perfecta la melancolía y nostalgia de la canción. Podríamos decir que el estribillo tiene casi un estilo dubstep, aunque en los teclados apenas se aprecia. Es algo muy repetido por esta banda, lo podemos encontrar en otras canciones suyas como Drag Me To Hell. En cuanto a la explicación de esta canción, podemos decir que Morgana es la madre de los humanos, la máxima deidad. Se representa con la luz y los rayos del sol que emergen de su rostro. Simboliza el amor incondicional, protección y responsabilidad; es el comienzo y el final de todo ser humano, y Chris Harms lo expresa en el estribillo. Esta civilización siempre se preguntaba cuándo podrían ver a Morgana (Will I meet Morgana Soon?) porque era su esperanza. De hecho, las melodías lentas evocan ese amor y esa bondad de Morgana. En otras civilizaciones, Morgana es la diosa de los cristales. Su representación física es con un cuerpo muy femenino, con una luz de estrella en su frente, sin boca y con un gran agujero en el pecho donde debería estar el corazón. En la mano derecha no muestra nada, y en la izquierda sostiene una daga, símbolo de la luz.

 

 

Le sigue, como no podría ser de otra manera, Haythor. Con susurros, como si el diablo nos estuviera hablando, con muchísima distorsión de guitarra y teclados, esta canción recupera la energía y la fuerza. Es un industrial metal más puro por así decirlo, y es un tema muy oscuro. Los síntex envuelven el sonido quitándole algo de protagonismo a las guitarras y al bajo. Quizás en una canción tan fuerte echo de menos la introducción de más guturales y más doble bombo. Como he dicho al principio, no podría ser de otra manera que esta fuera la siguiente canción, porque el personaje antagónico a Morgana es Haythor. Es la otra deidad de la mitología de esta civilización. Las melodías de esta canción acompañan a la perfección a la personalidad de este personaje. Llama a Morgana “la diosa del vacío” (goddess of the void). Es un personaje masculino, simbolizado por todo lo oscuro y la luna. Simboliza el ego, el deseo, el daño y el amor posesivo, con un deseo malvado de transmitir dolor e ira. Lo podemos comparar con el demonio de la religión cristiana. Se representa físicamente con un halo oscuro alrededor de la cabeza, con cuernos en la frente y sin ojos. En el pecho tiene marcado un heptagrama y la forma de una media luna. Tres serpientes le nacen de la entrepierna. 

 

La séptima canción es Naxxar. Una canción muy siniestra, por los coros y el piano que nos transmiten cierta sensación de misterio, oscuridad y esoterismo. Estos dos elementos, junto con la batería, son lo más característico de esta canción. El palm mute del estribillo te transporta a otro mundo; quizás en lugar de la voz melódica, unos guturales le habrían dado más fuerza a esta canción. El final del tema es apoteósico, con los coros esotéricos, los guturales, el doble bombo y la guitarra a la misma par. De nuevo, una canción perfecta para hablar de un demonio mitológico. Naxxar es un demidios demonio, del lado de Haythor; es el contrapunto a Loreley. Transforma todo lo que Morgana considera como innecesario en cenizas. Por tanto, es el representante de las cremaciones. Se representa físicamente con un único brazo, en el cual porta un gancho. De su boca brota sangre negra en todas direcciones.

 

Le sucede Cut Me Out. Chris Harms hiperventila antes de comenzar con unos sintetizadores que me recuerdan en cierta manera a los que se realizaban en los años 90. Es un tema muy profundo; el estribillo es una auténtica maravilla por la potencia de la batería. La voz melódica del cantante es grave y aterciopelada; va a la perfección con temas como este que pretenden buscar cierta “epicidad” que logran sin duda alguna. Hasta ahora, de mis favoritos de este álbum. 

 

La siguiente es The Mortarian. Llama mucho la atención el bajo en esta canción, porque en las otras es casi inexistente debido a la alta producción de los teclados. Los sintetizadores, de nuevo, muy noventeros pero aplicados a la producción de nuestro siglo. Echo de menos más guturales en esta canción para poder darle más fuerza y energía. Combinan muy bien las partes de “subida” y “bajada”; la alternancia es perfecta. Los síntex envuelven dulcemente la canción haciendo de esta como dos partes: una más rasgada y otra más dulce. Los mortarian son un séquito de 343 entes que podemos comparar hoy en día a los ángeles. Luchan en el bando “bueno” para poder conseguir un equilibrio entre estructuras de poder. Son el nexo de unión entre Morgana y Haythor. Actuan de mediadores, y ven en el egocentrismo de Haythor el mal de la humanidad pero en Morgana también observan fallos, viéndola obstinada e inconsiderada. Por ello, luchan por el equilibrio entre poderes, y no se pueden representar físicamente porque son entes aéreos que solo se pueden distinguir por siluetas.

 

La décima canción es Under The Sun. Increíblemente cañera, con el sonido dubstep que se ha mencionado antes, le da ese punto de querer sacudir la cabeza hasta que romperte la cervicales. En el estribillo da cierta bajona porque baja el ritmo de la canción hasta tocar solo con un piano y la voz, pero va remontando lentamente hasta comenzar de nuevo en ese punto dubstep y metal que hace que le estalle la cabeza a cualquiera. Es una transición entre el industrial metal, el death metal melódico y algo de deathcore. Impresionante canción. 

 

La antepenúltima canción de esta primera parte es  In Darkness, In Light. Con un sonido como el de un piano de cola, que se funde con la batería y el resto de sintetizadores, se le quiere dar ese aire de epicidad que hemos visto en Cut Me Out. El estribillo tiene unos síntex muy techno que rompen en unas guitarras muy lineales. De otra parte, se mezcla ese sonido de piano de cola con los sintetizadores techno, con otros sintex que me recuerdan a RAMMSTEIN. El resultado, es una canción totalmente preciosa y se consigue esa “epicidad” superproducida. La canción es la mezcla perfecta entre la oscuridad de Haythor y la luz de Morgana.

 

La penúltima canción es Forevermore. Es una canción cuyo estribillo te hace querer saltar y en los puentes, los teclados son totalmente de música electrónica de los 2000. Aún así, el conjunto es perfecto, una canción muy movida que hace querer bailar y saltar, hacer headbang a la vez. Pocas canciones son capaces de conseguir eso.

 

La última canción es apoteósica; su nombre es Ruins. El sonido de las guitarras y de la batería me recuerdan al Delirium de LACUNA COIL. Es una auténtica pasada de canción, es fuerza y energía por los cuatro costados. Los guturales son brutales y de nuevo, tiene una alternancia de partes altas y bajas increíbles. Al principio deja sin palabras, porque es bastante distinto a lo que hemos ido viendo a lo largo del disco. Mezcla las melodías de las canciones de “luz” con la fuerza de las canciones de “oscuridad”. Es la mejor manera de poner fin a esta primera parte, uniendo los dos poderes de Morgana y Haythor.