Por Alberto Zambrano
Otro año que nos encontramos a las puertas del verano y otro año que no nos hemos perdido el INFERNO SUR, festival de referencia en el underground sevillano y que celebraba el pasado sábado 1 de junio su tercera edición gracias a Producciones Speakon. Hardcore y metal extremo es la fórmula de este señalado evento y esta vez no iba a ser diferente. Repetían como cabezas de cartel los madrileños BROTHERS TILL WE DIE con su brutal beatdown tras la primera edición. Les acompañarían sobre las tablas EIKON, INYOURFACE, BEHEADING SAMSARA y THE LAST CHANCE. Un pack de bandas de calidad a un precio muy asequible al que el público sevillano supo responder con una afluencia más que aceptable.
THE LAST CHANCE
El cuarteto de Sevilla sería la primera de las tres bandas que jugaban en casa, hecho que se tradujo en una gran respuesta en general por parte de los asistentes. La banda practica un metalcore bastante genérico, alternando voces melódicas con growls y screams y con guitarras melódicas sobre bases pesadas. Formados hace apenas un año y medio, presentaron algunas de sus primeras composiciones como Take It Away, No One Will Save Us, una Broken Mirror contra la violencia de género o You Should Call a Psycholigist.
La gente fue animándose y los más incondicionales terminaron creando los primeros pogos de la noche, mientras Fran a la voz y Armando a la batería iban tratando de levantar al resto de la sala. Como nota, su bajista no pudo estar en el concierto, algo que se notó sobre todo en los pasajes más limpios. Sensación final de una banda con gran potencial y buenas composiciones, pero que han de trabajar todavía un poco más su puesta en escena.
BEHEADING SAMSARA
A continuación, sería el turno de BEHEADING SAMSARA y su death metal progresivo. Antes de comenzar, tuvo lugar un emotivo momento en el que el guitarrista Guillermo Carmona pronunció unas palabras para dedicar el concierto a toda la gente que lucha contra el cáncer y quienes lo padecen, pues su padre tristemente falleció la semana anterior debido a este terrible mal. Desde aquí mandamos a Guillermo y a su familia un fuerte abrazo.
No había tenido la ocasión aún de ver a este cuarteto cuya disposición sobre el escenario me recordó a la de los americanos MASTODON, con Guille a la guitarra y voz gutural a la derecha, Henry Thomas al bajo y voz raspada a la izquierda, Daniel Arenaza a la batería y voz limpia al fondo y Abraham Rodríguez a la guitarra en el centro de todos ellos. Es indudable que también en lo musical están fuertemente influenciados por los de Atlanta, sobre todo por lo que fueron sus primeros trabajos, así como aquellos inicios y madurez de los suecos OPETH y un toque thrash.
Curiosamente, ya que en teoría no es lo normal en la segunda banda de un total de cinco, se trató del concierto con más público presente, solo igualado por el de sus paisanos EIKON. Con un EP, Black Cloud Masses, grabado y masterizado por Pablo Díaz Madrid en La Salita Live Room, la banda amasa ya una importante suma de fieles, que disfrutaron de un concierto del que nada se puede reprochar, ni por actitud ni por sonido. Como era de esperar, tocaron su disco prácticamente al completo más una versión de KORN, esta menos esperada por su estilo, muy celebrada entre el público.
INYOURFACE
La presencia de los granadinos INYOURFACE era el factor que más me motivaba a asistir a este festival, pues los llevo siguiendo desde su LP debut y por paradojas del destino (son habituales sus visitas a la capital de Andalucía en los últimos años) aún no los había visto en directo. Tuve mi primera oportunidad y vi lo que esperaba, no me defraudaron. Llegaban presentando su segundo largo, Wildlife, grabado, mezclado y masterizado por Alex Cappa en The Metal Factory Studios el año pasado y al que me animé a hacerle reseña.
El escenario se llenaba de atrezzo de su última obra y el ahora cuarteto formado por Lucas Megías a la voz, David Nievas a la guitarra, Francisco Cabezas al bajo y Adrián Sáez a la batería comenzaba su show con gran energía que mantendrían hasta el final, en un labrado intento de enganchar a un público que había disminuido en cantidad con respecto al concierto anterior.
Aunque su setlist estuvo dominado por cortes de su último trabajo, no faltó algún guiño a su anterior Arctic//Antarctic, como una Physis que no se hizo esperar o, ya terminando, Animalia, con la que Lucas pidió al público que se agachara y comenzar a saltar cuando el tema rompiera. Muy brutales sonaron los temas de su nuevo Wildlife, destacando Tropical, donde el frontman estuvo bien apoyado vocalmente por los coros de David, Savanna, Freshwater o Grassland.
Con Desert, primer single de este nuevo álbum, se despidieron los de Granada hasta una próxima ocasión, que atendiendo a las fechas de la gira que podemos ver en su Facebook, será dentro de no mucho.
EIKON
El misterio rodea a esta banda sevillana que por el momento se resiste a tener redes sociales. No les ha hecho falta para escuchar a la comunidad metalera de Sevilla hablar de ellos y hacerlo bien. Su metal pesado y denso cabalga entre el doom y el death metal, en claro contraste con la banda anterior y la que vendría después. En sus filas, caras conocidas de otras formaciones sevillanas que han tenido su recorrido.
Ante un numeroso y expectante público desglosaron algunos de los temas que formarán parte de su disco debut, como Elysium y The Creation. Su batería, que al principio acusó algunos problemas con el sonido, finalmente se rehizo y pudo tocar con normalidad. Personalmente, no llegué a conectar con la propuesta del cuarteto. Quizás no fuera el momento, pero el show se me hizo muy monótono y lineal. Que apenas pronunciaran unas palabras para romper un poco el hielo, tampoco ayudó. Eso sí, musicalmente estuvieron impecables y se nota el tiempo que llevan trabajando en el proyecto. Estaremos atentos a la progresión de esta enigmática banda.
BROTHERS TILL WE DIE
Para finalizar, los madrileños BROTHERS TILL WE DIE pondrían la guinda con su contundente hardcore beatdown y su actitud desenfadada, que contrasta directamente con la música que ejecutan. Una de nuestras bandas más internacionales nos daría un adelanto de lo que podremos ver el mes que viene en una nueva edición del RESURRECTION FEST, donde actuarán en el escenario principal del mismo.
Después de una intro trapera, la pista de la sala se convirtió en un campo de batalla donde karatekas marcaban su espacio con alguna que otra acrobacia. Mientras, la banda capitaneada por Felipe Alemán lo daba todo en el escenario para contentar a sus seguidores con temas como Facta Non Verba o Psalm 55, el cual estará incluido en un nuevo disco que será lanzado el 5 de julio. Aunque apunto se estuvo de llegar a algo más que palabras cuando los más activos del pit daban rienda suelta al llamado crowdkilling, siendo muy mal recibido (con razón) por algún espectador más pacífico.
Hasta en dos ocasiones la banda cedió un micro a alguien del público para que cantara la parte en la que colabora un vocalista invitado, algo interesante de ver y que rompía un poco la linealidad haciendo el concierto más entretenido. Alternando temas nuevos como Llorando a los muertos o Blood For Blood con clásicos de su anterior The Thin Line Between Death and Immortality como Back In The Game o Agony Loves Me.
No sin antes dar agradecimientos a la organización, resto de bandas, público, técnicos y hasta camareros de barra, BROTHERS TILL WE DIE se despidieron con su particular versión de Anaconda, de la artista Nicki Minaj, finalizando así un entretenido y potente show. Nos marchábamos satisfechos después de ver a cinco bandas que demostraron por qué están entre lo mejor del metal y el hardcore andaluz y nacional. Este tipo de eventos son una joya. ¡Por muchas ediciones más!