Por Chus
Después de su crucifixión y posterior muerte, aquel hombre que se autoproclamaba el hijo de Dios fue descolgado de su cruz. Fue llevado por mis esbirros a la cueva, la cual se suponía que sería su tumba. Pero ahí estaba yo, esperando su cuerpo, y su alma. Mis leales secuaces lo depositaron en el suelo, y salieron de la caverna, sellándola con aquella inmensa roca.
Una vez sucedido éso, comencé a dibujar los símbolos alrededor del fiambre. En ese momento vi como convulsionaba, y fue como si despertara de una intensa pesadilla, la cual aún no había acabado.
El hijo del carpintero en ese instante miró a su alrededor, en un nuevo estado de dolor indecible, viéndome allí en frente de él, erguido y leyendo, primero en susurros y luego gritando, aquel libro mas antiguo que el tiempo.
El fin de aquella liturgia era corromper su alma divina, restarle poder y absorber parte de su energía en beneficio de Satán.
Su cuerpo comenzó a levitar. Ya no había gritos, solo espasmos. Vi como aquella increíble aura comenzó a rodear todo su cuerpo, iluminando toda la cueva. Seguidamente observé como parte de ella desaparecía y cambiaba de color. Un color muerto y siniestro. Entonces cayó violentamente al suelo.
Terminé la ceremonia, satisfecho de haberla completado con éxito. Sabía que parte de su fuerza y espíritu ahora eran poseídas por Lucifer, y que el mal se había implantado en su ánima. El trabajo había terminado, el volvería a la vida a los 3 días y subiría al reino de su padre, donde solo era cuestión de tiempo que comenzara a corromperlo a él, descuidando en un comienzo su propia creación, para acabar aniquilándola por completo, ¡AQUEL CON CUERNOS HABÍA GANADO!
Una vez sucedido éso, comencé a dibujar los símbolos alrededor del fiambre. En ese momento vi como convulsionaba, y fue como si despertara de una intensa pesadilla, la cual aún no había acabado.
El hijo del carpintero en ese instante miró a su alrededor, en un nuevo estado de dolor indecible, viéndome allí en frente de él, erguido y leyendo, primero en susurros y luego gritando, aquel libro mas antiguo que el tiempo.
El fin de aquella liturgia era corromper su alma divina, restarle poder y absorber parte de su energía en beneficio de Satán.
Su cuerpo comenzó a levitar. Ya no había gritos, solo espasmos. Vi como aquella increíble aura comenzó a rodear todo su cuerpo, iluminando toda la cueva. Seguidamente observé como parte de ella desaparecía y cambiaba de color. Un color muerto y siniestro. Entonces cayó violentamente al suelo.
Terminé la ceremonia, satisfecho de haberla completado con éxito. Sabía que parte de su fuerza y espíritu ahora eran poseídas por Lucifer, y que el mal se había implantado en su ánima. El trabajo había terminado, el volvería a la vida a los 3 días y subiría al reino de su padre, donde solo era cuestión de tiempo que comenzara a corromperlo a él, descuidando en un comienzo su propia creación, para acabar aniquilándola por completo, ¡AQUEL CON CUERNOS HABÍA GANADO!
Estáis dentro del lúgubre y maligno mundo musical de Nebiros, donde probablemente seáis testigos de la rápida caída de la civilización tal y como la conocéis, y del exterminio de millones de almas a manos de su propio hacedor.
Alemania fue el país que vio nacer a los black metaleros Nebiros en 1997. Éstos brindaron al mundo su blasfema primera demo dos años más tarde de su creación , llamándola Vagina Pectoris of Jesus Phallus, dando cuenta al universo de lo que eran capaces.
Sus siguientes pasos discográficos antes de ofrecernos su primer L.P. fueron tres demos más, tituladas Jan Skalla (2001), Stacheldraht (2003) y Komando666 (2006), sorprendiendo a todo fanático del black underground, y dejándolo ansioso porque los de Berlín lanzaran al mercado su primer álbum rápidamente.
Finalmente el debut de Nebiros fue lanzado por el sello No Colours Records en 2008, y bautizado con el nombre de Kurwa Satana. Durante los aproximados 37 minutos que dura el plástico, estos blackers se dedicaron a masacrar cráneos, comenzando así su reino de terror.
Después de un gran parón compositivo que nos hacía pensar lo peor, este combo volvió a deleitarnos con otra embestida el 31 de julio de 2015, titulado simplemente VII, siendo el auténtico culpable de que yo escriba estas líneas.
Alemania fue el país que vio nacer a los black metaleros Nebiros en 1997. Éstos brindaron al mundo su blasfema primera demo dos años más tarde de su creación , llamándola Vagina Pectoris of Jesus Phallus, dando cuenta al universo de lo que eran capaces.
Sus siguientes pasos discográficos antes de ofrecernos su primer L.P. fueron tres demos más, tituladas Jan Skalla (2001), Stacheldraht (2003) y Komando666 (2006), sorprendiendo a todo fanático del black underground, y dejándolo ansioso porque los de Berlín lanzaran al mercado su primer álbum rápidamente.
Finalmente el debut de Nebiros fue lanzado por el sello No Colours Records en 2008, y bautizado con el nombre de Kurwa Satana. Durante los aproximados 37 minutos que dura el plástico, estos blackers se dedicaron a masacrar cráneos, comenzando así su reino de terror.
Después de un gran parón compositivo que nos hacía pensar lo peor, este combo volvió a deleitarnos con otra embestida el 31 de julio de 2015, titulado simplemente VII, siendo el auténtico culpable de que yo escriba estas líneas.
En esta ocasión Nebiros nos ofrenda un álbum variado, pérfido y maligno, repleto de cambios de dirección y no exento de sorpresas. Hablamos de un disco no muy ortodoxo dentro del black metal, de difícil escucha , pudiéndolo apreciar mejor con cada nueva reproducción.
Por otro lado el blacker que decida oírlo se topará con generosas aportaciones de teclado, incluido con clase, y momentos de voces limpias aterradoras durante los aproximados 50 minutos de duración de VII. Por supuesto no faltan los blastbeats, aunque no abusan de ellos, y las vueltas de tuerca sonoras suelen ser una constante.
Después de esta descripción general, pasemos dentro de la sala de autopsias para extraer los mejores órganos de este infernal monstruo.
Por otro lado el blacker que decida oírlo se topará con generosas aportaciones de teclado, incluido con clase, y momentos de voces limpias aterradoras durante los aproximados 50 minutos de duración de VII. Por supuesto no faltan los blastbeats, aunque no abusan de ellos, y las vueltas de tuerca sonoras suelen ser una constante.
Después de esta descripción general, pasemos dentro de la sala de autopsias para extraer los mejores órganos de este infernal monstruo.
Destacaría Boga ciało, Na placu piekła y Pożądanie por las siguientes razones:
Boga ciało es un up tempo con uso de blastbeats y ráfagas de velocidad thrash, donde calan al oyente con buenos parones, y una buena parte mas pausada que dinamiza mucho el track. También incluyen una parte melódica tétrica, que acaba reventado con la violencia inicial.
Na placu piekła tiene una estructura muy similar a Boga ciało, siendo los tracks mas sanguinarios de todo VII. Así que preparaos para quedaros sin cuello de tanto hacer headbanging.
Pożądanie tiene un riff inicial de corte thrash en los primeros segundos de la tonada, aderezado con ráfagas de blast, y otro riff netamente black, adornándolo con una bajada de tempo y cambio de riff, para retomar magistralmente la parte principal de esta.
Si no eres de esos que no le da varias oportunidades a los Long Play te aseguro que acabarás apreciando a Nebiros y su VII.
Nota: 5´5
