Hoy os traemos el análisis del último trabajo discográfico de la banda AEVERON. Formados en 2002 en la pequeña ciudad de Zwickau (Alemania) esta prolífica formación nos han entregado ya 4 álbumes de estudio: Construality (2004), Existential Dead End (2008), Impending Doom (2011) y el que nos atañe hoy, el más reciente titulado VVD: Destination Annihilation, que salió a la venta a finales de Mayo de 2015. Además, también editaron un EP titulado The Ancient Realm en 2006. Estamos hablando de una banda bastante regular y que no han perdido el tiempo durante su corta carrera. Eso sí, es una banda tremendamente desconocida y que apenas superan los 2000 seguidores en Facebook, cosa que me resulta tremendamente extraña, teniendo en cuenta su carrera y calidad técnica.
Hay cuatro mentes pensantes tras AEVERON, que son: Thormas Berthel a la voz, Jens Lötzsch a la guitarra, Dirk Neidhardt al bajo y Paul a la batería. El estilo que practican está claramente orientado al sonido melodeath sueco que tantas satisfacciones nos ha dado a lo largo de los años y especialmente en los 90. Pero también en su sonido incorporan ciertos elementos blackmetaleros, como blast beats infernales o voces rasgadas que suenan bastante infames y agresivas. Además, en sus letras, hablan entre otras cosas sobre batallas históricas, un tema lírico que es bastante usado en muchas bandas de Black Metal.
Las bandas a las que tal vez te recuerde este álbum pueden ser algunas como At The Gates, Kalmah, Hipocrisy o Agathodaimon, entre muchas otras. El sonido que impera en el CD es el death melódico sueco, sin duda. Podemos escuchar bonitas armonías y muchos pasajes melódicos, guitarras con tonos muy elegantes y algún que otro solo sobresaliente (como el del tema “Mittermacht“). Todo aderezado de la poderosa voz de Thomas, que imprime gran energía y fuerza a las composiciones con su estilo growl, muchas veces ayudado por una sola voz limpia, donde ya no se exactamente si es el propio Thomas el artífice de esta o es otro miembro del grupo el que apoya la linea vocal de AEVERON. En este aspecto pueden incluso recordar a veces al estilo de Dimmu Borgir. Es una interesante sinergia donde los dos tipos de voces se combinan y crean un efecto épico y brutal a la vez. Tenemos por otro lado, el aspecto más puramente black del CD, con ciertas atmósferas fantasmales, oscuras e infernales, gracias también a la incursión de un teclado.
Con un interludio de dos minutos titulado “Shedding no Tears” a mitad de disco, podemos escuchar la bien ejecutada técnica de estos 4 músicos en temas como “Delusion“, “Insanity” o “Cave Hominem“. Las canciones tienen una duración perfecta, entre 4 y 5 minutos, con partes bien diferenciadas que hacen que la escucha sea amena y no nos aburramos ni un segundo. Es cierto que no incorporan nada nuevo que nos atraiga de una manera especial en la escucha de este CD, pero también hay que decir que su estilo es muy marcado y tienen realmente claro lo que quieren hacer, con personalidad y elegancia. Tal vez eche en falta algo más de sentimiento o “feeling” en muchas canciones, que se me hacen excesivamente inorgánicas y frías, pero lo compensan otros temas como “Mitternacht“, que considero el mejor tema del álbum o la que da título al álbum “VVD – Destination Annihilation” con una increíble melodía que recorre todo el tema durante sus partes más rápidas y más pausadas. Algo hipnótico tiene este tema que hace que lo quieras escuchar una segunda vez, tal vez sea esa melodía que te atrapa.
1. Never Led Astray
2. Delusion
3. Mitternacht
4. The Plague
5. Insanity
6. Shedding No Tears
7. Cave Hominem
8. VVD – Destination Annihilation
9. Last One On Earth
10. A New Dawn