Por Melisa Gámez

El paso de los finlandeses APOCALYPTICA, promocionando su nuevo álbum Shadowmaker finalmente tuvo lugar el 2 de Noviembre en el coliseo de Oporto, habiendo sido antes previsto para Abril, cuando la banda decidió aplazarlo para una mejor preparación de la gira. Sin lugar a dudas todo un acierto, ¡puesto que llegaron pisando fuerte!

La elección de la banda australiana TRACER que los teloneaba esa noche, a todos nos dejó un poco sorprendidos, por la actitud de rock duro directo, lejos de las fusiones de los cabezas de cartel. Sin embargo TRACER se entregaron esa noche al 100%. Sólo el cantante y el guitarrista Michael Brown se mostraron un poco más moderados. Por su parte el bajista Jett y el baterista Andre Sabio se vieron mucho mas extrovertidos y cómplices con un público entregado, sin parar un segundo en toda su actuación.

Lograban así la deseada ovación del público al final de su set. Esta fue su segunda actuación en Portugal, puesto que ya estuvieron en 2012 teloneando ni más ni menos que a BLACK LABEL SOCIETY. Estos chicos saben bien con quien codearse!

 

Poco después de las 22h por fin llegaba el gran momento que muchos fans estábamos aguardando ansiosamente. Público de todas las edades se daba cita esta noche para recibir a los anhelados APOCALYPTICA. Después de ser recibidos con una gran ovación empezaron con “Grace“, seguidas de “Reign Of Fear”  y “I’m Not Jesus”, cuando entró por primera vez en el escenario el cantante Frankie Perez. Acompañando a los violonchelistas Eicca Toppinen, Paavo, Perttu y Mikko Siren a la batería.

A primera vista da la impresión de que Franky Perez no es del estilo de los demás integrantes del grupo, mostrando quizás menos fuerza, pero solo aparentemente, porque con sólo abrir la boca y soltar ese chorro de voz, te das cuenta de que se compaginan a la perfección, formando así un gran equipo en el escenario, y visto su buen rollo con el resto del grupo, seguro fuera también. Sonando “House of Chains” y “Not Strong Enough” es cuando Eicca atrae más fuerte aún el entusiasmo del público allí asistente, los cuales aplaudían con euforia.

 

A pesar de los más de 20 años de carrera, APOCALYPTICA todavía están muy asociados con versiones de METALLICA, uno de sus referentes con más peso, y así empezaron a sonar los primeros acordes de “Master of Puppets“, y caldeando el ambiente “Inquisition Symphony” de SEPULTURA, en medio de temas propios y de los evidentes cambios de ánimo que causaron temas como el ansiado “Bittersweet” o
Harmageddon“. Siguieron con “Hope“, “Riot Lights” o el tema que da nombre al álbum “Shadowmaker“, en el cual es uno de los cortes en que Eicca participa más en los coros. Con todo el coliseo coreando el ansiado estribillo de “Shadowmaker“, “Hole In My Soul” fue uno de los temas de los que yo denomino “especiales”. Un tema con muchísima esencia en el escenario, para dejar paso a las versiones más esperadas de SEPULTURA y METALLICA: “Refuse, Resist”, “One” y “Seek and Destroy”, momento álgido de la noche sin duda.

Todo esto acompañado por unos efectos de luz y proyecciones que nos dejaron con los ojos como platos. Impresionantes los efectos visuales sin duda. Fue entonces cuando la bandera de Portugal tomó forma en la parte posterior del escenario, y los allí asistentes cantaron y corearon el himno la portuguesa con fuerza, con el acompañamiento de un muy entregado Eicca Topinen. Anunciado como el último tema de la noche “Hall Of The Mountain King” del compositor noruego Edvard Grieg para la obra Peer Gynt, ahora sí parecía que esta gran noche estaba llegando a su fin. Dando la bienvenida de nuevo al vocalista Franky Perez, empezó a sonar “I Don’t Care“. Si se me permite decirlo para mí fue el tema con más destreza y fuerza de la noche. O porque no decirlo, mi favorito.

Quizás el único problema a destacar de la noche fue un problema técnico poco después del comienzo del show, que obligó al técnico a subir al escenario para solucionar los problemas que estaba teniendo Perttu, lo que hacía sentirse un ambiente de tensión en el escenario y sobretodo en el mismo Perttu. Pero una vez solucionado, todo volvió a la normalidad. Fue una noche para recordar y recargar energía con toda la que APOCALYPTICA desprende en el escenario. ¡La mejor muestra de que el heavy metal no es solo bajo, guitarra y batería!