Las profecías comenzaban a ser ciertas de alguna manera, y más concretamente una de ellas. Al llegar el apocalipsis debido a una guerra química, la inmensa mayoría de la población pereció. Días después los pocos supervivientes observamos con horror cómo aquellos cadáveres volvían a levantarse. Lo que por mucho tiempo fue ciencia ficción y religión acabó siendo una realidad. La resurrección había llegado. Los muertos campaban a sus anchas buscando algún pobre desgraciado que devorar.
Cinco días había pasado desde que me escondí en este parking. Las cámaras aún funcionaban, así que podía controlar la zona. Me las ingenié para crear trampas que pararan o acabaran con los zombies. El problema era los víveres. La máquina expendedora acababa de darme el último bocadillo precocinado. Ahora se me planteaba el problema de buscar sustento alimenticio. Era consciente de que tendría que salir ahí fuera, y de que irónicamente pudiera perder mi vida para buscar algo con lo que poder seguir respirando. Finalmente me armé de valor y salí de mi escondrijo. El viciado aire me producía arcadas mientras que, totalmente aterrorizado, le quitaba a los restos de un guardia de seguridad su arma. Por fin salí del aparcamiento. Sabía que a tan solo dos manzanas de allí se encontraba aquel supermercado. La calle era un completo caos, una maraña de coches destrozados y cuerpos por doquier, pero ningún «podrido» a la vista. Pude llegar sin mayor problema al mercado. Aparentemente no se veía ni oía nada. Estúpidamente pensé que tendría suerte, al menos esta vez. Una vez dentro llené mi mochila. Poco quedaba ya allí. El camino de vuelta fue tan simple como el de ida. Cuando por fin vi a lo lejos el estacionamiento escuché el sonido de la detonación de un arma de fuego. Entonces sentí un dolor indescriptible en mi pierna derecha. Caí al suelo gritando de dolor. Obviamente me habían disparado. Estos bastardos posiblemente me habían estado vigilando y ahora iban a robarme todo lo que había conseguido. Se acercaron a mí. «¿Qué hacemos con el?» «quitémosle la comida y después arrojémoslo a los mordedores», decían mientras yo suplicaba piedad. Les dije que podía proporcionarles un lugar seguro, que podíamos cooperar y sobrevivir a esto, pero no me prestaron atención.
Me subieron en un coche y un par de km después me arrojaron del vehículo en marcha al lado de un grupo de engendros. Se acercaron a mí lentamente. Después comenzaron a devorarme. En mis últimos instantes solo deseaba no convertirme en uno de ellos… Bienvenidos al universo de NOMINON. Sólo el más fuerte sobrevivirá.
NOMINON es un veterano combo de Death Metal Procedentes de Suecia. Iniciaron su carrera musical en 1993, en plena explosión del «metal muerto». Desde entonces han publicado multitud de demos splits y cinco discos de estudio.
Para celebrar sus 23 años destrozando cráneos, los suecos nos ofrendan su hasta la fecha primer álbum en vivo bautizado con el nombre de «Chaos in the Flesh…Live!»
Lanzado el 2 de febrero de 2016 vía Hexed Cemetery, este trabajo contiene la peculiaridad de haberse editado en MC en edición limitada a 200 copias. Por supuesto el susodicho es el culpable de que existan estas agónicas esquelas.
El line up es el siguiente: Henke Skoog (voz. Además componente de Cryptonit, Nightmare City, Eviscerated, ex-Inverted Cross), Juha Sulasalmi (guitarra y voces. Ex-Choronzon, ex-Dion Fortune, ex-Sarin), Per Karlsson (batería. Asimismo forma parte de Deströyer 666, In Aeternum, Nex, Benediction (live), ex-Dion Fortune, ex-Serpent, ex-T.A.R, ex-Wortox, ex-Die Hard, ex-Interment (live), ex-Altar, ex-Suffer), AntiChristian (guitarra). Usan bajista de sesión para los directos.
En este nuevo asalto estos tipos nos regalan el mejor ejemplo de cómo se las gastan en directo, haciendo un buen repaso a toda su historia. Este live album es toda una apisonadora que nos muestra de manera fehaciente de qué pasta están hechos estos tipos, ofreciendo una clase magistral de TRUE SWEDISH OLD SCHOOL DEATH METAL. Ningún seguidor de la banda ni de este tipo de metal extremo en general debería perdérselo. Así se hacen las cosas, hermanos.
Los riffs son tremendamente mórbidos, siniestros y adictivos, ejecutados a velocidad de vértigo. Por otro lado muestran cierta vena blacker en según qué tracks. Todo ello lo aderezan con unos ocasionales solos de guitarra.
Los registros vocales se basan en inhumanos growls. La batería destrozará tu alma a base de up tempos y blast beats. Por supuesto no dejan de lado los ritmos menos trepidantes, aunque lo que prevalece es precisamente la velocidad.
Es prácticamente imposible escoger algún tema ya que el nivel de agresión e intensidad no baja ni un solo segundo en esta acometida. A pesar de ello recomendaría especialmente «Sodom’s Fall», «Malicious Torment» y «Undead Beast» por las siguientes razones:
«Sodom’s Fall» contiene un inicio arrollador que entremezcla riffs a una cuerda y fluidos. La sorpresa viene con ese momento más «melódico» sobre la mitad de la tonada. ENORME.
«Malicious Torment» es uno de los asaltos más salvajes de este redondo. Si no me crees póntela, pero te advierto que es toda una patada en el estomago.
«Undead Beast» te dejará alucinando con las guitarras de carácter marcado a mid tempo sobre la mitad de la canción. El resto ya te puedes hacer una idea; un torrente de violencia sónica sin parangón.
Esto es autentico «metal muerto» de la vieja usanza. Insidioso y oscuro como lo fue en su día, como aún es y como debe de seguir siendo. Aquí no hay florituras innecesarias ni sobreproducciones. Recomendado para la antigua guardia y para todo aquel novato que desee saber de qué va esto.
Nota: 10
Tracklist:
1. In the Name of Gomorrah
2. Sodom’s Fall
3. Mantra Reverse
4. Hordes of Flies
5. Malicious Torment
6. Undead Beast
7. Submit to Evil
8. Blaspheming the Dead
9. The Cleansing
10. Mausoleum
11. Release in Death
12. The Hammer (MOTÖRHEAD cover)