Uno de los regresos más esperados por sus seguidores tras 7 años de silencio ha llegado a su fin, DIMMU BORGIR están de vuelta con Eonian, editado por Nuclear Blast, justo cuando cumplen 25 años creando su particular symphonic black metal, y os puedo asegurar que este trabajo es el más orquestal de todos, quedando poco de la fiereza de su Enthrone Darkness Triumphant (1997), para mí su mejor trabajo. Este que nos trae al caso, continua con su anterior obra Abrahadabra, en una línea muy similar, trabajando con Jens Bogren y contando con un artwork creado por Zbigniew M. Bielak (GHOST, BEHEMOTH, MAYHEM).
En mi opinión, que mantengan el grueso duro de la formación tras 25 años en la música con Shagrath en las voces y las guitarras de Silenoz y Galder, a los que se unen en los últimos trabajos la percusión de Daray y los teclados de Gerlioz. Bajo el titulo de Eonian, y en palabras de Shagrath, este álbum representa la ilusión, el tiempo y el llegar a conseguir lo que siempre has querido, siendo un tributo a la historia de la banda y del Norwegian black metal y del que hablaremos a continuación.
Es un álbum que necesita varias escuchas, aunque a la primera entra muy bien, para apreciar todos sus matices y su grandiosidad, con un gran trabajo de la Schola Cantorum Choir de Noruega, muy presente a lo largo de todo el álbum desde que lo iniciamos con The Unveiling, donde la epica y la maldad se encuentran por doquier, con unos riffs de guitarras y un doble bombo muy marcado, una epopeya macabra para iniciarnos en nuestro camino. Las orquestaciones iniciales de Interdimensional Summit, te llevará a recordar viejos tiempos, pero con unos ritmos más metaleros, mientras la voz de Shagrath se entremezcla con las corales en un estribillo mágico y muy álgido, uno de mis cortes preferidos. Aetheric, continua con la homilía black metalera, con un marcado paso vocal, como si de una narración se tratase con una parte final instrumental muy melódica que nos llevará hacia la moderna Council of Wolves and Snakes, un corte experimental y con toques de folcklore en sus arreglos, donde DIMMU BORGIR dan un paso más hacia su estilo personal y distinto al resto, donde apreciamos una considerable subida de ritmo en su parte más blacker hasta el momento, pero aderezada con un toque místico muy particular y perfecto en un corte distinto pero que engancha cada vez más.