Los suecos LIPZ están de enhorabuena con la salida de su nuevo trabajo de estudio llamado Scaryman.
Hablar de un grupo joven y sueco es sinónimo de éxito, y es el caso de LIPZ, que tras firmar con Symphonies Records & Burning Minds Music Group, están listos para comenzar a girar de nuevo. Ya llevan unos años en activo, exactamente desde 2011 cuando Klintberg Bros Alexaneder (voz y guitarra) y Koffe (batería) tomaron la decisión de formar una nueva banda contando con uno de sus mejores amigos Conny Svärd (Guitarra). Fue entonces cuando la banda comenzó a buscar un líder que estuviese a la altura, y tras varios intentos fallidos, fue cuando el mismo Alexander decidió tomar las riendas, y coger el micro, llegando así a la conclusión de que la banda al fin estaba completa. Fue allí por el 2012 cuando la banda lanzó su primer single Ghost Town, y tres años después sacaron su primer EP oficial bajo el nombre de Psycho.
No cabe lugar a dudas que ya bien sea por los fríos meses de invierno que padecen por aquellas tierras, o simplemente por las ganas que le ponen, este disco tiene mucho que desgranar… y comenzamos con su nuevo single Get it on el cual rebosa altas dosis de glam desde el principio. Un tema muy acertado como single, puesto que tiene esa energía pegadiza, y ese estribillo que no conseguirás sacarte de la cabeza en un buen rato, incluso nos hace recordar a los Fineses RECKLESS LOVE, o SANTA CRUZ.
No cabe duda que ya inmersos en el rosco, éste te invita a seguir escuchando más, así pues llegamos a Star la cual tiene aires mas ochenteros con unos riffs de guitarra que encajan a la perfección en su estribillo fiestero. Pongámonos las gafas de sol, cardémonos un poco el pelo, y le damos al play con el que fue su primer single Scaryman, la cual poco podemos añadir, puesto que ya tiene todos los condimentos para llevarla al directo y arrasar con ella.
La cuarta pista bajo el nombre de Trouble in Paradise es… ¡oh, dios mío! una no quiere ser repetitiva, pero ¡este es otro bombazo en toda regla! con esos coros que te invitan a saltar y gritar con ellos “hey, hey!“
Normalmente los discos muy lineales nos aburren, los discos muy variados nos alteran los sentidos, pero después está la opción de hacer un disco como este, con una esencia clara y determinada, pero a su vez fresco y con gancho, lo cual en vez de aburrir, sólo te invita a seguir escuchando. Llegamos así a los cortes Get up on Stage y Fight, ambos temas perfectamente ejecutados. Cabe mencionar que aparte de la potente voz de Alexander, se nota que todo el grupo emplasta a la perfección, haciendo llegar así a nuestros oídos temas como los anteriormente citados.
Continuamos con Falling Away, la cual quizás es la típica canción que te hace bajar un poco las pulsaciones, pero a su vez en algunos tramos te hace saltar de nuevo para hacer un air guitar (risas).
Vamos a ver, estos chicos vienen pisando fuerte, porque no hay ni un solo tema del disco al cual le puedas poner alguna pequeña pega, uno tras otro son TEMAZOS que sinceramente, no sé vosotros, pero a mí me gustaría poder disfrutar en directo pronto, como es el caso de la aplastante Tick Tock.
Lógicamente, como en cualquier buen disco que se precie, tiene que incluir una balada, como ésta Everytime i close my eyes, la cual pone el broche de oro a este disco. Con su base acústica te engancha desde el minuto uno, simplemente puedes quitarte el sombrero y disfrutarla con algún pañuelo cerca…
Sin duda hay discos para todos los gustos y de todo tipo, si bien es cierto que a veces cuando nos encontramos un disco con 14 o 16 canciones, a menudo se nos hace largo, aunque nos guste, pero no es el caso de este Scaryman que cuando terminas de escucharlo te quedas con ganas de seguir escuchando más. No me cabe la menor duda de que estos chicos darán mucho de que hablar, ¡y ojalá podamos disfrutar de ellos en directo pronto! No les perderemos la pista.