Review: THY ART IS MURDER vuelve con su disco más crítico, “Human Target”

Bajo el título de Human Target, se nos presenta el nuevo álbum de los australianos THY ART IS MURDER editado de nuevo bajo Nuclear Blast, donde nos presentan una decena de nuevos cortes impregnados de un deathcore moderno y contundente, aunque muy continuista con el estilo y con el suyo propio, es decir, ¿innovación?, no, pero siguen demostrando que, como su portada a manos de Eliran Kantor, son un autentico rodillo critico/social sobre la humanidad y la descomposición humana.

 

Human Target y New Gods, nos dan la bienvenida con unas guitarras graves, agresivas y contundentes, donde apreciar elementos progresivos, creados por Andy Marsh y Sean Delander, intercalándose con la percusión de Jesse Beahler, nuevo miembro que sustituye a Lee Stanton; mientras CJ McMahon pone su voz al extremo para transmitirnos mensajes sobre el tráfico de órganos y los nuevos dioses informáticos a los que rendimos nuestro tiempo, las redes sociales. A pesar de que es un estilo donde hoy en día se evoluciona poco, nos dejan canciones para disfrutarlas en directo como Death Squad Anthem con unos aplastantes ritmos y un bajo muy poderoso del que se encarga Kevin Butler, para con Make America Hate Again, dejarnos un temazo en toda regla con unas estrofas aceleradas y un estribillo directo a la yugular, donde el headbanging está asegurado, una de mis preferidas del álbum.

 

Llegados a la mitad del trabajo encontramos Eternal Suffering donde dejan de lado el deathcore, para transformarlo en un corte death metalero con unas estrofas sin concesiones, dejando los matices modernos para el centro del corte, donde destaca el trabajo técnico de la percusión; otro tema para la lista. Con Welcome Oblivion y Eye For An Eye nos dejan una desesperada lucha donde la naturaleza en un futuro no muy lejano se vengará del ser humano por todo el daño que le está haciendo, pero donde destaca Voyeurs Into Death, uno de los temas más oscuros y profundos que han realizado en los últimos tiempos, apocalíptico y agresivo hasta la saciedad que se abre paso antes del cierre con Chemical Christ.

Y es que THY ART IS MURDER, regresan con su octavo álbum desde aquel Ep 2008 con el que se dieron a conocer, Infinite Death. Tras 11 años, han ido escalando dentro de la escena deathcore y aunque este no sea su mejor trabajo, si que le ha de servir para establecerse en la cabeza de la escena junto a grupos como CARNIFEX, SUICIDE SILENCE… del deathcore mundial. 6’5/10.