Por Rubén Montejo

 

 

Uno de los reyes del metalcore está de vuelta. KILLSWITCH ENGAGE (KSE a partir de ahora) editó el pasado 21 de febrero su noveno (9º) álbum de estudio, tras casi seis años de silencio discográfico. Y no ha podido volver más en forma y con más fuerza. Resulta que su nuevo trabajo (que lleva por título This Consequence) es uno de los más sólidos de su carrera, llegando o incluso superando en algunos momentos sus mejores discos. También es uno de los más cortos que ha publicado hasta la fecha (35 minutos clavados) y ha sido editado bajo el sello Metal Blade Records.

 

La principal baza de este nuevo redondo de KSE sin duda es esa corta duración, que, unida a una producción excelsa y unos temas pegadizos y agresivos convierten a This Consequence en una golosina adictiva para cualquier amante del metalcore en su vertiente más melódica. Hay que recordar que KSE se formó en el siglo pasado, concretamente en el año 1999 y que a día de hoy siguen siendo la punta de lanza del estilo, sin haber perdido un ápice de calidad ni de actitud en estos más de 25 años de historia. Fueron muchas las bandas que surgieron en esa época, pero muy pocas las que han llegado a este 2025 con el estado de forma que atesora la formación oriunda de Massachusetts.

 

Hay que destacar por encima de todo el trabajo en esta grabación del baterista Justin Foley que entrega sin ningún tipo de duda su mejor versión con una ingente cantidad de blast beats y ritmos groove rompecuellos acompañados de unos platillos brillantes y que suenan a la perfección, con gran definición. Culpa de ello, en parte, la tiene la magnífica producción del CD, obra del guitarrista Adam Dutkiewicz, que siempre ha estado a cargo de estas labores en la banda (además de ser un grandísimo guitarrista). Todo en este disco suena en su sitio, sin altibajos y con notable nitidez, ataque, brillantez y definición. Una pasada.

 

Las melodías se entrelazan con maestría con las partes más groove y agresivas de una manera natural, de esa forma que solamente KSE sabe hacer y que es reconocida al instante. Solos vertiginosos y cargados de melodías que se cruzan con riffs gruesos y muy bien escritos, con un palm mute ejecutado a la perfección y adornados de una multitud de detalles que vas reconociendo a medida que escuchas más y más el álbum. Porque ya te aseguro que si eres fan de la banda o del estilo, no lo vas a escuchar solamente una vez…

 

 

Cierto es que KSE no inventa la rueda y que su fórmula sigue prácticamente intacta desde sus inicios, aunque hay que destacar alguna variación de Jesse Leach en su trabajo vocal donde juguetea con unos registros más profundos y guturales de los habituales, aproximándose al deathcore que ahora está tan de moda. Le sienta muy bien y se nota que no son metidos por seguir la corriente actual. Sus partes limpias siguen siendo emotivas y sensibles, transmitiendo a la perfección. Es un magnífico vocalista. Todos estos factores unidos hacen que este sea posiblemente el disco más duro y contundente de KSE.

 

Por otro lado, el bajista Mike D’Antonio está como siempre intratable, tanto en su trabajo a las 4 cuerdas como en su faceta visual, ya que, por si no lo sabíais, Mike se encarga de la portada, fotografía y arte gráfico de la banda desde sus inicios. Es verdad que esta cover artwork ha quedado un poco extraña, como descolorida, pero igualmente resultona y llamativa. Como colofón, Joel a la segunda guitarra tampoco defrauda y hace un tándem junto a Adam difícil de superar dentro del estilo que estamos tratando. Una de las parejas de guitarras más carismáticas y completas del metalcore melódico.

 

En definitiva un disco que es corto, se hace más corto aún y devorarás si eres fan de la banda o del sonido metalcore melódico. Uno de sus trabajos más logrados y que no defrauda para nada. Sin inventar nada nuevo, KSE sigue emocionando y transmitiendo y eso, en una banda que lleva más de 25 años sin parar de trabajar ya es mucho. Dentro del estilo muy pocas bandas son las que han sobrevivido este último cuarto de siglo y mucho menos que hayan seguido manteniendo un nivel y una convicción tan sólida como la de KSE. Canciones destacadas: The Fall of Us, I Believe o Discordant Nation. De las mejores pero sin desmerecer el resto, porque en This Consequence no hay relleno. Muy recomendado y de sobresaliente: 9/10.

 

Canciones incluidas:

Abandon Us
Discordant Nation
Aftermath
Forever Aligned
I Believe
Where It Dies
Collusion
The Fall of Us
Broken Glass
Requiem