Texto: Adriana Rockmero; Fotografías: Adriana Rockmero y Urban Music
La noche del sábado 5 de abril los fieles seguidores de SAUROM se dieron cita en la Arena Ciudad de México para presenciar el concierto de la banda ibérica. Tras la buena acogida en 2023 en la Arena Ciudad de México y un año más tarde en el Juglar Fest, SAUROM convocó a los juglares para presentar su nueva producción El Principito, un trabajo que ha traído consigo un sello lleno de magia y emociones.
Desde temprano, cientos de fans caracterizados con pintas de bufones y vestidos del Principito se reunieron en el recinto, creando un ambiente de nostalgia y recuerdo de la infancia. Al entrar al recinto, una pantalla enorme con la imagen del nuevo disco de la banda nos recibió. La velada arrancó con un prólogo que incluyó arlequines y malabaristas danzando por el escenario.
El Batallón de Mordor y los músicos tomaron sus lugares, y el concierto comenzó con El Mordisco de la Serpiente. La soltura vocal de Elizabeth Amoedo, engalanada con un vestido rojo que llamó la atención de todos, y la emoción de Miguel fueron sensacionales, y el público no tardó en unirse al ritmo del compás.
A continuación, se presentó Nostradamus con Isra Ramos y Ramón Lage, quienes se unieron a Miguel y Elizabeth en un instante magistral. La energía en el escenario fue palpable, con Raúl y Joselito disfrutando cada acorde que emitían.
La banda interpretó algunas de sus canciones más emblemáticas, como La Hija de Las Estrellas y La Leyenda de Gambrinus, que resonaron en la Arena e hicieron cantar y bailar al público. La comunión entre la banda y el público fue evidente, y la energía derrochada en el escenario se mantuvo durante toda la velada.
El concierto continuó con temas como Músico de Calle, Baobabs y La Leyenda con los Cueros de Vino, que fueron recibidos con entusiasmo por el público. La noche se convirtió en una celebración de la música y la emoción, con momentos inolvidables como No Seré Yo y El Hada y La Luna, que dejaron una huella indeleble en la retina de los asistentes.
En el ecuador del concierto, el Pájaro Fantasma sobrevoló el recinto, y el Batallón de Mordor tomó su lugar. La energía era indescriptible, y Elizabeth y Miguel hicieron una celebración romántica que provocó una ola de emociones en el público.
La banda siguió interpretando temas como El Laberinto De los Secretos, Burlesque y Vida, que inyectaron deseos de seguir viviendo en el público. También presentaron Todo en Mi Vida, una balada que se llevó gran ovación en la noche, y Llorona, un tema que visualmente fue emotivo con el tricolor en el escenario y una mujer caracterizada de Llorona.
La muchedumbre emocionada y con la ilusión por tan épicos momentos, el escenario era una caja de sueños destilando por todo el recinto con sus notas que hipnotizaban a todos los presentes. SAUROM tenía en una sola mano a todos los que estábamos ahí esa noche.
Todos esa noche perdimos la noción del tiempo, parecía que el tiempo estaba detenido es un sueño. Para ello, El Carnaval del Diablo sonaba y Krampus salió al escenario, la fiesta, el baile y la emoción estaban más que presentes.
En El Rey que no sabía mandar paso un momento que no olvidaré jamás, ver a una familia completa bailar y cantar, haciendo un círculo verlos a las cuatro disfrutar de tan bella melodía que hasta los niños pequeños cantaban a todos pulmón.
La banda siguió interpretando temas como Fuego, Noche de Halloween y La Taberna, que fueron recibidos con entusiasmo por el público. El concierto culminó con Epílogo, un momento emotivo que provocó aplausos, gritos y emociones en el público.
La banda se acercó y se fundio en un cálido abrazo frente a su público, se ve la unión que tienen sus integrantes. Poco a poco salieron todos los que participaron en el concierto, bailarinas, invitados, el Batallón de Mordor, todos para cerrar con broche de oro el concierto.
No se necesita abarrotar la Arena CDMX para dar un espectáculo de alta calidad, como lo hizo SAUROM. Las 10 mil personas que estuvieron ahí vivieron momentos de emociones que jamás olvidarán. La entrega y el amor de fans y banda se reflejaron en el evento, donde se pudo ver el derroche de pedidas de mano a las novias, comunión familiar, entrega y pasión.
SAUROM sigue escribiendo historia en su carrera, continuando su legado de manera magistral. Demuestra que los sueños se hacen realidad y que solo debes tener la llave mágica para seguir dando cuerda a tus ilusiones. ¡Enhorabuena!