Por Chus
 
La noche era fría y apacible antes de que yo junto con mis discípulos, todos ellos integrantes de aquel clan de oscurantismo, comenzáramos con los rituales, donde nuestra intención no era otra que abrir la puerta dimensional, para que el gran maestro Barús pudiera acceder definitivamente a nuestro plano astral. Llegamos una vez más a aquella explanada en medio del bosque, y después de dibujar en la tierra aquellos arcanos símbolos comenzamos la liturgia. A medida que la ceremonia iba avanzando, el clima también iba cambiando paulatinamente. Vimos como el cielo se encapotaba gradualmente de unas extrañas nubes color púrpura y el viento experimentó un claro in crescendo. Seguidamente, nuestros ojos no daban crédito a lo que se planteaba ante ellos. El cielo comenzó a resquebrajarse, y un gran circulo similar a un agujero negro de color escarlata se estaba abriendo ante nosotros. Comenzamos a ver como una gran cantidad de amorfos seres, procedentes de esa dimensión, estaban a punto de entrar en nuestro plano sideral, rasgando automáticamente el continuo espacio-tiempo. Instantáneamente nos percatamos de como nuestras extremidades se contorsionaban extrañamente, causándonos un indescriptible dolor, mientras que aquellos demonios seguían entrando en nuestra dimensión. Tirado en el suelo retorcido del más increíble tormento físico que jamás había experimentado, vi a duras penas como Barús salía finalmente de aquel portal cósmico, consumiendo el cuerpo y el alma de mis discípulos uno a uno hasta llegar a mí. Me levantó agarrándome la cabeza con una de sus terroríficas extremidades, y entonces sentí como su ser, su misma esencia y alma se introducía en mi cuerpo, tomando el control de este. Ahora estoy encerrado en mi propio cuerpo, arrinconado sin posibilidad de escapatoria en la celda que Barús ha creado en mi mente y espíritu. Siento como día a día me voy consumiendo, hasta que llegué el día, en que finalmente yo deje de existir como tal y solo exista él.
Estáis dentro del indescriptible y abominable mundo de BARÚS, donde moriréis consumidos por su poder, así que no os resistáis y preparaos para morir.

 
BARÚS es un nuevo proyecto de experimental progressive death metal que nace de las cenizas de Project Jim. Procedentes de Francia y formados en 2015, estos franceses editaron su hasta la fecha, único trabajo en forma de Extended Play el 9 de Marzo de 2015, en el que nos ofrecen únicamente 4 cortes en unos escasos 23 minutos aproximadamente.
El line up de esta formación es el siguiente: R (ex-Project Jim) se encarga del bajo, A se pone tras los platillos y los bombos, mientras que M (ex-Project Jim) y J (Maïeutiste, Wolflust, ex-Project Jim) se encargan de las guitarras y, K (Caïnan Dawn y Maïeutiste, ex-ProjectJim) hace el papel de las voces.

A lo largo y ancho de este E.P, el oyente se topa con todo un ejemplo a seguir de frescura en cuanto a composición y ejecución de riffs se refiere, mostrando en cada pieza que forma este trabajo un buen escaparate de estos, pudiendo decir que son de corte adictivo, experimental, intensos, oscuros e intrigantes. Los temas suelen moverse en el medio tempo de pulso rápido, pudiéndonos encontrar pasajes más pausados de origen inquietante, aunque en un par de ocasiones estos nos regalan alguna que otra ráfaga de blastbeats, aunque como ya he señalado anteriormente, lo que predomina en ellos no es precisamente la velocidad.
Los temas en líneas generales se salen de los convencionalismos del death metal para explorar terrenos más ocultos dentro del estilo, otorgando un enfoque diferente al género. Ahora bien, una vez expuesto en líneas generales lo que os podéis encontrar en el E.P, pasemos a diseccionarlo tema a tema.Ven, pasa a la sala de autopsia, y prepárate para ver cada centímetro de sus fétidas entrañas.

El corte que da el pistoletazo de salida no es otro que “Tarot”. Este comienza con un riff demencial con ráfagas de blastbeat, para seguidamente dar paso a varios cambios que convierten el tema en un medio tempo en el que se incluyen voces limpias y un solo decadente a la par que caótico, que hace de puente para recuperar el riff del principio y los blastbeats. Inmediatamente y para acabar, llega otro cambio más, terminando en un medio tempo agónico tanto en velocidad como en riffs.
Pasamos a “Disillusions”. Esta pieza sería junto con el primer y último corte los que destacaría sin ningún tipo de dudas. Comienza con un riff simple y llanamente adictivo, metiendo de muy buenas maneras varias capas, una de voz torturada y otra de guitarra siniestra para explotar finalmente con los deathgrowls, enseñándonos en ese punto, el riff principal y unas voces limpias amenazadoras. Enseguida incluyen un interludio en limpio aún mas desasosegado (si eso era posible), estallando inmediatamente con riffs de tintes progresivos para retomar una vez más el riff principal que pone punto y final al segundo asalto.
Llegamos a la recta final con el penúltimo ataque sonoro llamado “Chalice”. Descubrimos una apertura de composición pesada con voces limpias, para continuar con un nuevo cambio de riff de corte dinámico, siendo este el grueso de la tonada. Automáticamente vuelven a modificar la dirección de “Chalice” para meternos un nuevo fragmento limpio, considerablemente envolvente y enigmático, que vuelve a explosionar con un nuevo riff y sus ya clásicas voces desesperadas en limpio.
El punto y final lo pone “Cherub” en el cual pasan de ofrecernos un primer riff de naturaleza tenebrosa a otro más pesado, sirviendo de puente para mostrarnos un buen cambio de velocidad, dinamizando el corte increíblemente. “Cherub” tiene un sentimiento cercano al black metal, y por segunda vez, los franceses nos muestra ráfagas de velocidad en su música, uniendo esa rapidez con riffs absolutamente desquiciantes, logrando de esa manera, el máximo de intensidad en esta canción, para una vez conseguido, retomar la parte del principio.

Te aseguro que BARÚS te dejará con las manos en la cabeza durante horas, ya que no darás crédito a la frescura aquí mostrada, y si no me crees atrévete a darle una oportunidad a su brillante experimental progressive death metal, ¡no quedarás decepcionado!.

Nota Personal: 9

Tracklist:
Tarot
Disillusions
Chalice
Cherub
 
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