No todo es doble bombo y tapping en la viña del señor, en el heavy también hay sitio para el amor -que diría Charlie Glamour-.
Así que entre mis discos de speed metal y death, ha ido a parar uno de rock: Claudia y Costello.
Mi ciudad es un pueblo mediano -ni grande ni pequeño, simplemente es-, y cuando hay nuevos lanzamientos, me gusta -qué menos- darles una vuelta, a ver que se cuece en este hervidero musical llamado Pamplona.
JABI IZURIETA se llama el pibe que suena en mi equipo de música y se dedica a hacer canciones.
El Dromedario Records nos trae un redondo que contiene el rock más clásico, eso sí, cargado de alma.
Diez cortes eclécticos dentro de lo que es el rock clásico americano al más puro estilo Dire Straits, por poner como ejemplo una banda de notoria consistencia.
Llamas de Alquitran es el tema indroductorio, guitarra añeja y piano perfectamente cohesionados con la voz de Jabi. Este es la antesala de lo que nos vamos a ir encontrando a través de este viaje al centro del alma humana.
Canciones bien construidas, algunas con melodías más alegres, como Buscadores de Almas o Black Jack y otras más melancólicas como 1936 o Clases. Otras de toque más cantautor como la ultima, homónima al disco. E incluso nos encontramos con una acústica, Oh Julia, armónica y guitarra.
El trabajo Jabi es inconmensurable, así como del resto de músicos que hacen de este disco un trabajo bien construido, desde y para el corazón.
Hacedle un hueco entre vuestros álbumes, para cuando os sintáis melancólicos o necesitéis medicina para vuestro interior, pues este trabajo no va a defraudar a nadie.
Puntuación: 7/10
