Texto y fotografías por José Emilio Paqué
 

Buenas eran las referencias que tenía sobre EL ALTAR DEL HOLOCAUSTO antes de acudir a Granada para cubrir su último concierto, o como ellos mismos dicen su especial “homilía“, tanto en lo musical como en lo relacionado con la puesta en escena del grupo. Como pudimos comprobar es una banda que cuida hasta el más mínimo detalle, prueba de ello son los casi 150 conciertos que han ofrecido ya en su VIA CRUCIS TOUR, su especial cruzada musical, que los ha llevado a tocar incluso en festivales con renombre como el RESURRECTION FEST.

El lugar de culto elegido para la ocasión fue la sala BoogaClub, situada en buen sitio, pues al estar en pleno centro de la capital granadina está bien comunicada. En nuestra ocasión al venir de fuera no nos quedó más remedio que coger el coche, pero como fuimos con tiempo no nos fue difícil encontrar aparcamiento en las inmediaciones, cuestión de paciencia. Tras reponer fuerzas y disfrutar de unas buenas tapas, típicas de la famosa gastronomía granadina, nos dirigimos a la sala.
 
 
Antes de abrir las puertas, sobre las once y cuarto, ya nos congregábamos fuera mas de una veintena de personas, aunque la asistencia  poco a poco iba en aumento. Resguardándonos del frío en el interior pudimos comprobar como estaba ya todo preparado, tanto el equipo y los instrumentos, donde destacaba la imponente batería con varios cráneos de carnero y flores a modo de adornos, así como el resto de parafernalia preparada para la ocasión: cruces, pancartas… no faltó tampoco la pedalera de la guitarra con sus estampas de santos.
 
A la hora de las brujas, en penumbra y con el Requiem de Mozart sonando de fondo, sorprendieron al público entrando en procesión desde la parte de atrás, con sus habituales atuendos blancos de penitencia, cual nazarenos con la cabeza tapada también por el sayo, mientras que portaban una cruz al frente hasta el escenario, para sin dilación comenzar su descarga musical.

Como si de un pastor se tratara, su batería Reaper Model bendijo la ceremonia con sus baquetas a modo de cruz,  cando comienzo a su canción Cuando los sacerdotes que llevan el arca del Señor de toda la tierra… donde el pesado sonido stoner inundó el ambiente juntos con algunos duros riffs de guitarra, introduciendo a los asistentes en la particular atmósfera creada por la banda.
 
El culto tuvo su continuación con el sonido más progresivo de Again I say to you, it is easier for a camel to go through the eye of a needle, than for a rich man to enter the kingdom of God, ganando en potencia en los estribillos donde su guitarrista Weasel Joe se elevaba espiritualmente para regalarnos momentos mas íntimos en las partes mas lentas. 

 

De nuevo, nuestro maestro de ceremonias, Reaper volvió a atraer toda la atención hacía él, cuando subiéndose sobre su taburete y abriendo los brazos en cruz, volvió a bendecir a los “hermanos” allí congregados, dejándolos estupefactos.
 
Entre rezos, bendiciones y oraciones, donde por supuesto no faltó algún beso por parte de Weasel Joe a las estampas que adornaban su pedalera, continuaron con Eis Qui Sine Peccato Est Vestrum Primus In Illam Lapidem Mittat, desvelándonos por completo su misterio musical, que hizo rozar o incluso llegar al éxtasis a más de un fanático, que arrancó con gritos de “viva la Blanca Paloma”,“Jesucristo, Jesucristo” o “viva Fray Leopoldo” (santo muy honrado en Granada).
 
 

Nos mostraron su lado más doom, más pesado y oscuro con Ego sum via veritas et vita, sirviendo de antesala al momento cúspide de su actuación con El Que Es Bueno, Es Libre Aún Cuando Sea Esclavo; El Que Es Malo, Es Esclavo Aunque Sea Rey. Con un público muy entregado, mientras que Weasel Joe creaba magia a las 6 cuerdas, Skybite bajaba al público e, imitando a Moisés en el Mar Rojo, lo abría en dos en un pequeño wall of death.
 
Nos presentaron Del corazón de Cristo nace el hombre de corazón nuevo, no recogido en sus dos anteriores trabajos, otro salmo divino que sonó limpio y claro al igual que todo el concierto (“culpa de ello” en gran parte gracias al buen trabajo del “hermano” de sonido).

Terminado Act I. Crvcis abandonaron el escenario para tener que volver a salir y hacer un bis tras la insistencia del público, que no paraba de corear “otra, otra”. Volvieron entre aplausos para alargar la ceremonia un poco más, dando agradecimientos tanto a la promotora, en este caso Tras la cortina Producciones, al público por su apoyo en su segunda visita a Granada y a la sala. Con Lucas I, 26-38 terminaron, con un Skybite que volvió a darse un baño de multitudes entre el público, bendiciéndolo  con el grave sonido de su bajo.
 
Pusieron el broche final a una actuación que nos mostró a una banda que ha crecido a pasos agigantados, madura y muy bien asentada sobre los escenarios, que supo fascinar al público de principio a fin. Sin duda dejaron muchas bocas abiertas, consiguiendo más adeptos hacía su obra y más de un converso a su estilo.
 

 
 


Es de agradecer también la interesante apuesta de Tras la Cortina Produccciones, que huyendo de la monotonía y la mediocridad, vuelve a apostar de nuevo por algo diferente,  por grupos, como en este caso EL ALTAR DEL HOLOCAUSTO con su post rock-metal instrumental, que se salen de los cánones establecidos.

 
Amén para todos ellos.
 
Setlist:
 
1- Cuando los sacerdotes que llevan el arca del Señor de toda la tierra metan los pies en el agua, el río se dividirá en dos partes, y el agua que viene de arriba dejará de correr y se detendrá como formando un embalse.
2 – Again I say to you, it is easier for a camel to go through the eye of a needle, than for a rich man to enter the kingdom of God.
3 – Eis Qui Sine Peccato Est Vestrum Primus In Illam Lapidem Mittat.
4 – ego sum via veritas et vita.
5 – El Que Es Bueno, Es Libre Aún Cuando Sea Esclavo; El Que Es Malo, Es Esclavo Aunque Sea Rey.
6 – Del corazón de Cristo nace el hombre de corazón nuevo.
7 – Act I. Crvcis
-BIS-
8 – Lucas I, 26-38.

 

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