La banda de Vigo nos presenta este nuevo álbum, compuesto por 8 temas y que es el segundo LP de su trayectoria, iniciada en 2011. Cuatro son los integrantes de YEMET: con Serx a la voz, Mariano Alonso a la guitarra, Brian como baterista y Rigo al bajo.
Autodefinidos como un grupo de groove que se acerca a lo alternativo, “El que vive en los sueños” nos muestra esos estilos, pero también otros fragmentos en los que podemos pensar en thrash.

Con letras en español, este trabajo se compone de bases fuertes y consistentes marcadas por el bajo. Sobre ellas se escuchan buenos riffs de guitarra, muy duros, combinándose con muestras de una técnica soresaliente a la hora de hacer punteos. Por otra parte, tenemos una voz a la que no se le acaban los registros. Para cantar partes más melódicas como para desgarrarnos los oídos con guturales, siempre se escucha perfectamente y cuadrando bien con los demás instrumentos. La batería tampoco sufre con el doble pedal ni haciendo redobles o ritmos más lentos, lo que permite que encontremos distintos altibajos de intensidad dentro de los cortes.

Con partes cañeras, otras más tranquilas y técnicas, estas son las 8 canciones que forman El que vive en los sueños“, de YEMET:

1. “Hoy no”: Este es el tema que abre el LP. Comienza con todos los instrumentos a la vez, sin ningún tipo de introducción tranquila o que suba poco a poco. Después entra la voz, haciendo guturales. Cuando cambia el tono se asemeja a voces como la de HÉROES DEL SILENCIO por los ecos. También tienen versos que se cantan más precipitadamente, pues entran juntos en los golpes entrecortados de la música. A su vez, se incluye una parte acústica en torno al minuto 3, que pega un freno brusco a la dinámica de la canción. Encima de esta parte se escucha el solo de guitarra, breve y que da paso de nuevo a los riffs distorsionados y al doble pedal.

2. “Intruso”: Desde el primer momento nos hace mover la cabeza, ya que es una muy buena canción para practicar headbangging. La voz entra pronto y los ritmos son duros y entrecortados. El estribillo es más tranquilo, con sonidos de teclado de fondo y una buena línea melódica. En esta ocasión la voz se ve acompañada por coros.

3. “Alas de metal”: Con un tiempo lento y un riff de guitarra que alterna las notas graves y agudas, así son los primeros segundos de este tema. Después se une la voz, en un plano secundario. El estribillo es sencillo, con notas sueltas, pero con una melodía pegadiza. Primero con una voz tranquila y después gutural, hace una buena combinación, lo que lo convierte en uno de los mejores fragmentos del trabajo. El solo de guitarra se inicia después de una serie de golpes de batería, que utiliza bien los tambores. Tras esto tenemos un puente duro, a modo de break down.

4. “El extraño”: Sin perder ritmo comienza “El extraño“, donde un buen riff de guitarra se ve bien acompañado por el doble pedal y un bajo contundente. A estos ingredientes se suma una voz agresiva, que tras el verso y otra parte más nos deja a las puertas de un estribillo que llega más tarde. Este, de nuevo con una voz menos brusca, cuenta con un buen punteo de guitarra. Es un tema en el que también podemos apreciar la gran calidad de la batería.

5. “El que vive en los sueños”: El tema número cinco es el que da nombre al disco. Es una de las canciones más largas de esta composición, lo que la permite tener partes muy distintas dentro de sus más de 6 minutos. La introducciónes tranquila, con un teclado, que bien podría ser una nana. Después entran ya los demás instrumentos, que cuadran a la perfección con la melodía de las teclas y le da un toque siniestro muy bueno.

Golpes entrecortados, un gutural y de nuevo un verso de gran calidad que va seguido de una parte muy buena antes del estribillo. Buscando otra vez una alternancia entre dureza y melodía el estribillo vuelve a ser más relajado. Eso sí, la parte de mayor relax es el puente, en el que la voz se ve acompañada por acordes en acústico. Después entran también bajo y batería, manteniendo el ambiente tranquilo. Tras volver a subir la intensidad, la canción acaba volviendo al teclado.

6. “Niebla”: El corte número 6 tiene un riff pegadizo que recuerda a grupos como HAMLET. También la voz nos hace pensar en bandas como esta y otras como puede ser SÔBER. El estribillo vuelve a seguir esa pauta de volverse más melódico que el resto de la canción, con un buen riff de guitarra y con coros. Tras un buen solo de las 6 cuerdas entramos en el final, con unos compases que sirven como puente al estribillo.

7. “Los últimos 15 años”: La más extensa y una de las canciones que más destaca del disco. Este corte de más de 7 minutos comienza con una introducciónen la que apreciamos un sonido más psicodélico. Más tarde acelera el ritmo, y frena para que entre la voz, pero manteniendo el mismo riff de guitarra. Una vez más los instrumentos nos vuelven a mostrar su buena técnica a la hora de tocar, al igual que la voz, yendo de un registro a otro.

Pasada la mitad de la canción tenemos una parte tranquila, que desemboca después en un solo de guitarra. Pronto vuelven los sonidos distorsionados, con un nuevo punteo de guitarra pasando después al estribillo para finalizar la canción.

8. “Retroceder”: Para no perder ritmo, el último tema de “El que vive en los sueños“, empieza rápido y dando caña, hasta que frena un poco para meter también un punteo de guitarra que se acopla al riff y buenos golpes de batería. Después llega la voz, tan agresiva como en las canciones anteriores. Me parece que es una de las canciones que más tiene que ofrecer. También con un estribillo más melódico, lo que se nota sobre todo en la voz, pero que también tiene un coro gutural y un punteo de guitarra que va acompañando al bajo y la batería. En el puente bajo y batería se quedan solos justo antes de que comience un gran solo de guitarra que flota por encima del riff y del doble pedal. Tras esto, llega una parte perfecta para mover la cabeza, seguida del verso y del estribillo, para acabar así con “El que vive en los sueños“.

Es un trabajo innovador, que no se parece demasiado a otras cosas dado el conjunto de distintos estilos que podemos ver. Me recuerda a la primera vez que escuché a SOMAS CURE en ese sentido.
Un buen trabajo de YEMET en el que se nota la evolución de la música. Ahora solo queda esperar la buena reacción del público, tanto escuchando el disco como asistiendo a sus conciertos de presentación. Os animamos a ello, ¡valdrá la pena!

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